MADRID, 11 Nov. (CHANCE) -
Era el pasado mes de marzo cuando la diseñadora L'Wren Scott fallecía a causa de un suicidio en su apartamento de Manhattan. La novia del líder de los Rolling Stones, Mick Jagger, tomaba la decisión de quitarse la vida, haciendo que el propio cantante padeciera un profundo shock y sobre todo una tremenda tristeza.
Una tristeza que se ha manifestado a través de un estrés postraumático tal y como se ha podido conocer hace poco. Y es que 'Sus Majestades Satánicas' se tienen que enfrentar a la aseguradora de la banda, la cual no quiere soltar ni un duro por este motivo, el cual les obligó a cancelar varias actuaciones tanto en Australia y en Nueva Zelanda según informa el diario The Telegraph.
L'Wren Scott era uno de los nombres de la lista de personas que Mick Jagger tiene en la póliza del seguro de la banda, en la que también se encuentran Bianca Jagger y Jerry Hall, además de sus hijos. Sin embargo, parece que para la aseguradora, la muerte de la diseñadora no es una causa que entre dentro de dicha póliza. Debido a que es un suicidio, el seguro no lo considera como una muerte imprevista.
Como decimos, la baza de los Rolling Stones es mostrar que Mick Jagger sufre de estrés postraumático tras el suicidio de su novia, siendo diagnosticado por profesionales, que le recomendaron no trabajar durante algún tiempo -y el motivo por el que también se pospusieron esos conciertos- tal y como afirma The Telegraph. Un trastorno que le puede provocar desde sufrir pesadillas, hasta manifesarse sentimientos de culpa o incluso que el líder de los Rolling sufra parálisis emocional.
La cifra de la discordia son 12,7 millones de dólares que la banda reclama como sus pérdidas, pero la aseguradora parece no querer ceder. Veremos si la banda consigue al final alguna compesación o finalmente, todo se queda en agua de borrajas.