LOS ANGELES 1 Nov. (EUROPA PRESS) -
Ahora que tiene millones de fans en todo el mundo y sus canciones suenan en cada rincón, Justin Bieber no olvida que hace sólo tres años su familia atravesaba dificultades económicas y nadie le conocía. Sin tomar apenas clases de canto y armado con su guitarra, el joven ha explicado cómo hizo para conseguir triunfar en el 'show business'.
El cantante de 'Baby' llevaba una vida muy sencilla hasta el día en que decidió presentarse a un concurso de talentos en Stratford, la ciudad canadiense donde creció. A partir de ese momento se dio cuenta de que la gente valoraba su talento y empezó a plantearse un nuevo futuro.
"Es una locura pensar en hace tres años", ha declarado el cantante en una entrevista con 'Access Hollywood'. "No tenía nada que hacer y vi (el concurso) anunciado en el colegio. Pensé: 'Debería intentarlo', y lo hice. Quedé segundo en la competición".
Justin ni siquiera había tomado lecciones de canto hasta el momento, y aunque después del concurso tomó algunas "durante un par de semanas", las dejó al mudarse a Atlanta. Su educación musical se completa con clases de batería que recibió "desde los seis hasta los diez años", según él mismo revela.
Con dicha formación y sus ganas de triunfar, siguió cantando y soñando con hacerse un lugar en el mundo de la música, un futuro que parecía muy lejano visto desde su humilde situación.
La madre de Justin crió a su hijo en solitario en una vivienda de protección oficial, y las dificultades económicas de su infancia son algo que el joven no ha olvidado. "Vivíamos en un apartamento realmente pobre, dependíamos de cuánto había que pagar de alquiler", cuenta Bieber.
Aunque reconoce que nunca le faltó "un plato de comida o un lugar donde vivir", dependía de sus abuelos para darse caprichos, algo que ahora no es un problema dada su más que saneada cuenta corriente.
El paso definitivo a esta nueva vida fue la decisión de grabarse cantando y tocando la guitarra y la batería, para después subir los vídeos a YouTube. Las visitas se contaron por millones y el contrato discográfico no tardó en llegar. "No me lo podía creer, no podía creer que aquello estuviera pasando", concluye Justin.