El Padre Ángel ofrece una alternativa para las cenizas de Carmen Sevilla

   MADRID, 11 Oct. (CHANCE) -

   Hoy hemos conocido que parte de las cenizas de Carmen Sevilla siguen estando en el Tanatorio de Pozuelo de Alarcón. Una información que ha publicado la periodista Pilar Vidal en el periódico ABC y que confirmaba fuentes del crematorio: "Sí, están allí y pueden ser recogidas en cualquier momento, bien por su hijo o por cualquiera que lleve una autorización de este con la fotocopia de su DNI".

   Tras esta noticia, Europa Press ha hablado en exclusiva con el Padre Ángel y ha planteado una alternativa para los restos mortales de la inolvidable artista: "Desde la iglesia lo único que podemos hacer es rezar, y si tienen algún problema de dónde dejar las cenizas, nosotros en alguna de nuestras iglesias se puede dejar... sería un privilegio tener las cenizas de gente buena y gente no buena".

   El sacerdote le ha mandado un mensaje para Augusto Algueró: "A uno le sorprende porque uno cree en un mundo mejor en el que nos tenemos que querer y entender mejor... hay que quererse hasta después de muerto, los muertos no pueden querer pero los vivos sí podemos seguir queriendo a los muertos".

   Además, el Padre Ángel ha explicado que "es noticia porque es una excepción, si fuera lo que hacen todos como con María Teresa Campos, no sería noticia" por lo cual "es una señal de que vivimos en una sociedad rica en valores y cuando hay algo llamativo nos salta el corazón enseguida".

   El Padre Ángel desconoce cuál fue la última voluntad pero sí conoce "el cariño que la sociedad tiene por ella y Mensajeros al ver que no se hacía la misa se le hizo y yo creo que se le dijo al hijo, por lo menos Parada esto nos decía. Fue una misa preciosa donde la gente clamaba, lloraba y rezaba por Carmen Sevilla que ella tanto rezó. Era muy devota de la virgen, y ella seguro que está donde está la gente buena, que es en el cielo, y seguro que a ella le preocupa poco estas cosas".

   Por último, apenada y asombrado por la información, el sacerdote cierta la noticia, "nos entristece como si fueran las cenizas de un ser querido nuestro, por eso decimos que hay que querer también después de muertos".