MADRID, 26 Abr. (CHANCE) -
Patrick Dempsey no es el primer actor de éxito que aparca por un tiempo la actuación para dedicarse por entero al competitivo y arriesgado mundo del automovilismo. Al protagonista de Anatomía de Grey le precedieron grandes estrellas del celuloide, como Paul Newman y Steve McQueen, que dejaron al mundo boquiabiertos con su enorme capacidad y talento al volante.
Dicen que una de las mejores persecuciones automovilísticas de la historia del cine es la que protagonizó McQueen en la película Bullitt, escena que no necesitó de doble, ya que nadie como el actor, avezado piloto de carreras, para manejar aquel impresionante Ford Mustang Fastback.
“No estoy seguro de si soy un actor que compite o un piloto que actúa”, decía sobre su trabajo en la película Le Mans, en la que condujo él mismo un Porsche 917K. Estuvo en la parrilla de salida de Baja 100 y Seis Días de Enduro y era normal verle en circuitos, como Laguna Seca o Sebring.
La película 500 millas (1969) es la responsable del idilio de Paul Newman con la alta competición. Desde principios de los 70, con su debut como profesional en Thompson (Connecticut) y su segundo puesto en las 24 horas de Le Mans a los mandos de un Porsche 935, hasta pocos años antes de su muerte, cuando todavía se le veía por los circuitos de Estados Unidos al frente de su propia escudería, Newman Racing, el ganador de dos Oscar siempre estuvo ligado profesionalmente al universo de las carreras de coches. Con 70 años, entró en el Libro de los Guinness como el piloto más longevo de la historia tras ganar las 24 Horas de Daytona en la categoría GT1.
Otro contemporáneo de McQueen y Newman, el actor James Garner, se declaró un enamorado de las cuatro ruedas y de la velocidad. Fue la película Gran Prix (1966), recordada por sus realistas escenas de Fórmula 1, la que despertó su interés por el mundo del motor y un año después de su estreno ya estaba al frente de su propio equipo, American International Racers. Sin embargo, su vehículo favorito era el todoterreno, y logró colarse en alguna prueba importante, como Baja 1.000, que se celebra en México.
La historia del otrora ‘Doctor Macizo’ como piloto está todavía por escribir. Con poco más de dos años en la competición profesional, cuenta en su currículum con importantes triunfos, como los obtenidos en la American Le Mans Series, donde se alzó con un segundo puesto (Laguna Seca) y un tercero (Austin). Como titular del equipo Dempsey Proton Racing, el intérprete participará en el Campeonato del Mundo de Resistencia (WEC), que incluye la dura y prestigiosa 24 Horas de Le Mans. Además, será uno de los invitados de la Porsche Mobil 1 Supercup. Compromisos deportivos que le obligan irremediablemente a despojarse del brillante cirujano que enamoró a Meredith Grey y a millones de seguidores del drama médico de Shonda Rhimes. Le echaremos de menos y le deseamos la mayor de las fortunas en su arriesgada aventura.