MADRID, 11 Mar. (CHANCE) - Paula Vázquez presenta la revolución de la maternidad. La presentadora apoya el retrasar la maternidad, dando la opción a las mujeres a que puedan elegir. Durante la presentación en la clínica EVA Paula ha dado las gracias por ser la elegida para amadrinar esta campaña dos años consecutivos y nos cuenta que ella se ha hecho el tratamiento a los 38 años. En la rueda de prensa explica que cada ciclo menstrual cuenta y que el día que quiera ser madre no quiere tener limitaciones. Defiende que la mujer sea madre sin tener que estar pendiente del reloj biológico, y pone de ejemplo a sus compañeras de profesión Anne Igartiburu y Ana Rosa Quintana. Paula ha dejado la televisión y no tiene pelos en la lengua para explicar sus motivos, ya que considera que la pequeña pantalla se ha vuelto machista y deja a la mujer en un segundo plano, "depende la cadena son colaboradoras o azafatas. Las tienen de segundonas". Así de sincera se ha mostrado y continuo criticando la evolución de este medio "Sigo creyendo en el entretenimiento puro y familiar, y mientras tanto crítico el otro entretenimiento. Me dejan en mi casa". La modelo nos confiesa el momento más duro como personaje mediático, fue hace años, le hicieron una fotos en la playa y las editaron dejándola más delgada de lo que ella es: "Hubo un verano que me hicieron una cosa, una mano negra, esas fotos era manipuladas, eso sí que fue una manera de intentar no pueden meterse en mi vida privada, no me pueden humillar, y así me humillaron. Consiguieron que dejara de ir a la playa en años. Me asustaron". CHANCE: Esta campaña ¿Cuándo te vamos a ver con una tripita? Paula Vázquez: Pues fíjate que esto me ha hecho decidirme que cuando me dé la gana, y todavía no es el momento porque estoy muy joven y muy nueva, no noto la llamada de la maternidad, pero sí que quería quitarme este pesa, de encontrar la persona adecuada, porque caduco, vitrifique mis óvulos y me olvida, así me centre en mi vida. Ha sido un alivio. Y ver a compañeras como Anne, Ana rosa que los 50 han tenido niños, todavía tengo cinco años para pensar. CH: ¿En qué consiste la técnica? P.V: Se usa desde el 2007, pero se usaba para mujeres con antecedentes clínicos, pacientes de riesgo. Pero ahora nos hemos dado cuenta de que desde los 20 a los 25 los óvulos son muy fértiles, pero que a partir de los 40 desciende. El 33% de las mujeres que nos creemos fértiles, somos fértiles pero no es tan fácil. Pero ahora podemos vitrificar para continuar la carrera sin presión, no hay prisa de encontrar al hombre adecuado, y cuando lo decidas no puedas. Esto son todos ventajas CH: ¿Qué tiene que pasar para que quieras ser madre? P.V: Pues no lo sé, supongo que eso es algo, hay gente que lo sabe desde pequeña. Yo he tenido momentos y cuando he querido no he podido, y cuando he podido no he querido. Por trabajo o por parejas. Y ahora que sí que puedo no tengo la necesidad vital. Pero sí que me cuestiono que mañana puedo encontrar una pareja, más joven que yo que no tenga hijos, y queramos tenerlos. A lo mejor no puedo tenerlos yo, y los tengo que hacer con vientre de alquiler. Y ahora se abre el abanico de tener una con un amigo. Ahora no me hace falta el hombre, sino un buen amigo que quiera compartir conmigo la paternidad, un lujo. CH: Sí que es verdad que no es un tratamiento barato, precisamente. P.V: No, no es un tratamiento barato. Pero si echas la vista atrás y ves lo que te vas a ahorrar, sale a cuenta. Y yo he echado muchas cuentas. Lo que más me impresiono fue lo fácil y rápido. Son cinco días con hormonas, y de repente un día te los quitan y ya, relájate. Un gustazo, que bien invertido. CH: ¿Tienes algún amigo en el que hayas pensado? P.V: Un montón, la mayoría son gays y tienen pareja y no lo harían, pero tengo unos por ahí que tienen unos genes que digo por Dios, y que no se vayan a reproducir esos genes. A lo mejor algún día pido un favor. CH: ¿Tienes ganas de enamorarte y formar una familia? P.V: Bueno no es vital, ahora mismo no estoy en ese punto. Estoy muy bien sola con mi amigas viajando, de fiesta, entrar, salir y estudiar, prepararme, hacer mi vida. No me hace falta, estoy a gusto así. CH: ¿Has sufrido por amor? P.V: Claro y quién no. Claro me han dejado, me han puesto los cuernos, todo CH: ¿Con el paso del tiempo una se vuelve más exigente? P.V: Hombre claro. Pues sí. Sobre todo que las cosas las ves de lejos, lo hueles. CH: Si pudieses definir al hombre perfecto ¿cómo sería? P.V: Me vale con que sea hombre o muy hombre. CH: Todas tenemos que tener un mamarracho en nuestra vidas para valorar las cosas buenas P.V: Sí, hemos tenido mamarrachos también, pobres. Un beso mamarracho. CH: Sirven para aprender P.V: Pero solo uno. CH: Tenemos ganas de verte en TV ¿proyectos? P.V: No, todavía no. Hay cosas que me han enseñado productoras, pero luego no han llegado a buen puerto, pero es verdad que con esta edad te vuelves más selectiva. A los 16 años empecé en tv y he visto la evolución y no me gusta el papel de la mujer en entretenimiento, depende la cadena son colaboradoras o azafatas. Las tienen de segundonas, ahora se está bien en casa viendo la tele criticándola y cuando me merezca la pena me pondré a trabajar. CH: ¿No te da envidia una Lara Álvarez, Raquel Sánchez Silva, Cristina Pedroche, son programas que van mucho con tu perfil, que ya has presentado? P.V: No es que vayan con mi perfil, es que los empecé. No para nada, se acabo, mi experiencia en esos programas fue la fue y aprendí mucho. CH: ¿Pero qué ha pasado, porque has sido imagen de las cadenas durante muchos años haciendo trabajos impecables? P.V: Gracias. CH: ¿Ha habido una mano negra o qué ha pasado Paula? P.V: No seré yo la que abanderé estas cosas, pero supongo que algún día se verá. CH: Da mucha rabia a gente joven que hemos crecido viendo y a día de hoy, no os vemos. Nos preguntamos veto o mano negra. P.V: Todo influye, yo no quiero hacer según qué tipo de tele, y no estoy dispuesta a meterle los dedos a nadie. Yo el entretenimiento lo entiendo de otra manera, no voy hacer corazón porque no me gusta que se metan en mi vida privada, como me voy a meter en la vida de los demás. Sigo creyendo en el entretenimiento puro y familiar, y mientras tanto crítico el otro entretenimiento me dejan en mi casa. CH: ¿La interpretación? P.V: Bueno a veces, no tengo me ha hacía falta este tiempo, desde los 17 no había parado. No he tenido niños, deje pasar cosas y he empezado a vivir ahora, a salir con amigos a formarme. CH: ¿Te arrepientes? P.V: No, simplemente cosas en las que había dejado de madurar en ellas. Para mi trabajar era tener la voz bien, no tener ojeras. No sabía que era la noche madrileña. Y ahora me encuentro que no tengo que rendir cuentas a nadie. Puedo decir lo que opino sin que me digan nada, me siento libre. Y volver a atarme me está contando. CH: Lo que tienes es tipazo ¿te cuidas mucho? P.V: Muchas gracias, he empezado a hacer hipopresivos, que lo recomiendo. Porque a esta edad empieza a bajar, y las pérdidas de orina. El suelo pélvico hay que ejercerlo ahora. A parte he adelgazado porque he estado con gastroenteritis y he bajado unos kilos, me gustaría estar con un par más. CH: ¿Sigues sufriendo las secuelas de tu paso por la isla? P.V: No, en su momento sí. Pero en este caso ha sido un virus. Hubo un verano que me hicieron una cosa, una mano negra, esas fotos era manipuladas, eso sí que fue una manera de intentar no pueden meterse en mi vida privada, no me pueden humillar, y así me humillaron. Consiguieron que dejara de ir a la playa en años. Me asustaron. CH: ¿Es lo que más te ha dolido? P.V: Sí, jamás nunca nadie me había hecho algo así, no uso la prensa, ni juego con ella. Yo se que aquello fue un encargo, algún día lo demostraré. CH: ¿Quizás por ser tan buena, se te ha tratado un poco mal? P.V: No, es porque digo las cosas que pienso y eso no mola nada. CH: La diplomacia malo P.V: Cuando te ofrecen programas y dices que no porque es muy machista, malo. Pero siempre habrá alguien que lo haga. CH: ¿Te cuesta callarte? P.V: Ya ves, creo que después de esto no trabajo en la tele. Me cambiare de país. tengo compañeros en Miami y me dicen que hay mucho trabajo allí, no lo descarto. Pero hay otra parte personal que me viene muy bien no ser Paula Vázquez. CH: ¿Qué proyecto te gustaría? P.V: Una auto caravana, vendo todo me la compro, viajamos por ahí y vemos que hacen otras mujeres del mundo. Me encantaría un programa de mujeres. CH: No des ideas a ver si te las van a robar. P.V: Es verdad CH: ¿Y hacer el formato y presentar el piloto? P.V: Que ricas veo que queréis que trabaje, pues cada cosa llegara. Yo ahora no tengo necesidad. Veo la tele y no hay cabida para lo que a mí me gusta.