La presentadora, especialmente seria durante una solitaria mañana de gestiones en la capital en la que presumió de brazos musculosos y definidos
MADRID, 24 Ago. (CHANCE) -
Con Sergio Ramos totalmente adaptado a su nueva vida en París y convertido en uno de los nuevos ídolos de la afición del París Saint Germain a pesar de que una inoportuna lesión le ha impedido debutar por el momento con su nueva camiseta, Pilar Rubio ha regresado a Madrid para solucionar unas gestiones pendientes antes de instalarse, con el resto de su familia, en la ciudad de la luz.
A pesar de que la presentadora ha confesado lo feliz que está con esta nueva etapa en París y ha asegurado que la distancia no supone ningún problema a la hora de continuar con su faceta de colaboradora televisiva en 'El Hormiguero', hemos visto a una Pilar más seria de lo habitual en su vuelta a España durante un tranquilo paseo por la capital.
Muy favorecida con un vestido midi ceñido sin mangas y de rayas multicolor, que combinó con bolso y chanclas blancas, la comunicadora presumió de brazos torneados - que nada tienen que envidiar a los de la Reina Letizia - durante una mañana de gestiones antes de regresar a su casa con sus hijos, con los que está pasando unos días en Madrid antes de su mudanza definitiva.
Un traslado que podría traer a Pilar algún que otro quebradero de cabeza, ya que lejos de la sonrisa que luce habitualmente, la hemos visto seria, cabizbaja e incluso diríamos que triste en las que son sus primeras imágenes en España sin Sergio Ramos que, en los próximos días podría debutar por fin con el París Saint Germain. Un momento que la comunicadora vivirá muy de cerca, puesto que ya está ultimando los últimos flecos para dejar Madrid e instalarse con su familia en París.