MADRID, 20 Ago. (CHANCE) -
El estallido de la guerra entre Maite Galdeano, Sofía Suescun y Kiko Jiménez después de que la de Pamplona revelase en redes sociales hace casi una semana que su hija le ha echado de casa, y arremetiese duramente contra la influencer y su novio -con graves acusaciones y amenazas que ellos han puesto en manos de sus abogados- sorprendía a Christian Suescun de vacaciones en Galicia.
Aunque en un primer momento el hijo de Maite evitaba pronunciarse sobre el conflicto familiar y pedía respeto a través de Instagram, este lunes daba un paso al frente y rompía su silencio a través de una entrevista telefónica en 'TardeAR'.
Evitando posicionarse a favor de su madre o de su hermana, reconocía que lo está pasando muy mal. "Es un tema muy delicado en mi familia. Ya veremos cómo afrontamos todo esto. Yo soy Christian, mi madre es mi madre, mi hermana es mi hermana y Kiko es mi cuñado. Todos son familia, no es uno más que otro" aseguraba, confirmando además que aunque parece que la situación ha llegado a un punto de no retorno intentará mediar para que se produzca un acercamiento. "Dentro de lo que esté en mi mano sí" expresaba.
Sin embargo, parece que Christian ha tomado partido y esta mañana ha llegado a la casa de su hermana y de Kiko para reencontrarse con ellos. "Está todo muy revuelto. Son temas que es feo para hablar de esto ¿vale?" ha comentado ante los micrófonos de Europa Press, sin ocultar que la guerra tiene difícil solución: "Pues ya veremos, ya veremos. El tiempo lo dirá". "Esperemos que sí, que se solucione por el bien de todos, que se solucione lo antes posible" ha añadido.
Como nos ha contado, "Sofía está muy mal, muy mal. Lo está pasando bastante mal sí. Es un tema delicado. Y mi madre también... pff peor la pobre sí, sí. Pero bueno, esto tenía que llegar alguna vez ¿no?" ha admitido muy afectado, dejando claro que por el momento no quiere decir nada más sobre el tema. "Ya habrá tiempo para hablar. Acabo de llegar a Madrid" ha zanjado.
Un reencuentro con su hermana que Sofía ha compartido en redes sociales, publicando una imagen de ella, Christian, Kiko y un amigo entrenando en el gimnasio con una gran sonrisa. Y para celebrar que cuenta con el apoyo de su hermano en este delicado momento -y quien sabe si lanzar un dardo a su madre- la influencer ha organizado una barbacoa.
Numerosas bolsas con comida han llegado a su residencia y, mientras Sofía se ocultaba tras la valla grabando con su teléfono a la prensa, Christian era el encargado de recoger la compra, dejando entrever que se ha posicionado en esta guerra familiar mientras Maite, desesperada por lograr el perdón de su hija, continúa sola en Murcia.