MADRID, 7 Jul. (CHANCE) -
Después de seis días ingresado en la Ruber Internacional tras contagiarse de Covid-19, Mario Vargas Llosa ha recibido el alta. El escritor abandonaba en torno a las 10:00 horas de este viernes el hospital por su propio pie, acompañado por su hijo Gonzalo y con muy buen aspecto físico a pesar de lo complicada que ha sido la última semana.
Era su hijo Álvaro el que confirmaba con un comunicado publicado en su cuenta de Twitter que el premio Nobel había sido diagnosticado de Covid-19 y se encontraba ingresado en el hospital madrileño; y a pesar de que en un primer momento la preocupación fue máxima al tratarse de un paciente de riesgo a sus 87 años de edad, el peruano ha dado nuevas muestras de su fuerza recuperándose en tiempo récord de este importante susto de salud.
Minutos después de abandonar el hospital, Mario ha llegado a su residencia en el centro de la capital y, completamente recuperado, ha pronunciado sus primeras palabras tras casi una semana ingresado. "Estoy muy contento, sobre todo con las enfermeras y los médicos de la clínica Ruber que me han tratado maravillosamente bien" ha confesado con una gran sonrisa.
"Ha sido un susto muy grande pero ya está muy bien. Ya está en perfecto estado y muy contento de estar en casa" ha añadido su hijo Gonzalo, destacando "los centenares de mensajes" que han recibido en los últimos días con muestras de apoyo y de cariño.
"Así es" ha reconocido el Nobel. "Quisiera comentar también esos mensajes que los he recibido con mucho cariño" ha expresado, dejando en el aire si Isabel Preysler se ha puesto en contacto con él durante los últimos días para interesarse por su estado de salud.
Ha sido Gonzalo el que, cortando las preguntas sobre la 'reina de corazones' y sobre la boda de Tamara Falcó este sábado el que se ha despedido amablemente de la prensa antes de entrar en su domicilio, asegurando que lo que le toca ahora a su padre es "descansar y estar con toda la familia. Ya está perfecto". El momento, ¡a continuación!
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