MADRID, 20 Dic. (CHANCE) -
Si eres un moroso, las deudas te perseguirán hasta después de muerto. Eso es lo que le ha pasado a Prince, fallecido el pasado mes de abril debido a una sobredosis de fentanilo, sobre el que pesa una reclamación económica de 600.000 dólares por parte del bufete de abogados Cousin Law Firm. El despacho, con sede en West Palm Beach, reclama a la estrella musical el pago de la factura correspondiente al proceso de divorcio de su segunda esposa, Manuela Testolini.
Los abogados confirmaron un acuerdo con el cantante por el que este no tenía que pagar hasta que todos los cabos sueltos de la separación estuvieran bien atados. Los letrados consideran que el proceso finalizó el 1 de abril, el día del triste fallecimiento del artista, y por eso reclaman ahora el pago del adeudo.
¿Quién se hará cargo de la factura? ¿Los herederos? Para cursar la reclamación tendrán que armarse de paciencia porque los hermanos del compositor no se han puesto de acuerdo sobre los términos del reparto, las fricciones entre ellos son públicas y notorias, ávidos por llevarse su parte de un suculento pastel. Además, el proceso se podría ver continuamente retrasado por las múltiples reclamaciones paternales que se acumulan en los juzgados de Minneápolis.