MADRID, 13 Oct. (CHANCE) -
Si hace unos días Rocío Flores celebraba su cumpleaños con la compañía de amigos y de Antonio David y Marta Riesco, este jueves ha salido a comer con su novio, Manuel Bedmar, y su hermano, David. Muy feliz por el día que está pasando, la joven no ha querido entrar en las polémicas que hay servidas en su vida sobre su relación con Olga Moreno y Agustín Etienne.
De esta manera, hoy veíamos a Rocío comiendo en un restaurante con su novio y su hermano, pero sin la presencia de Olga y su hermana Lola ante los incesantes rumores de un distanciamiento con la exmujer de su padre. A la salida, la joven posaba junto a su pareja mientras que aseguraba que tenía que dejar a David en casa y que llegaba tarde.
Una vez en el interior del vehículo de su chico, Rocío recibe de forma inesperada y muy emocionada un regalo de un fan por su cumpleaños. La hija de Rocío Carrasco se sorprendía al recibir una fotografía junto a su abuela Rocío Jurado en un marco mientras que su seguidor le decía que tiene "toda la cara" de la cantante y que era la fotografía auténtica.
Pero esto no era todo, ya que Rocío recibía también un abanico pintado por el mismo fan y le daba las gracias por los regalos asegurando que le ha "pillado por sorpresa". La joven se bajaba incluso del vehículo en el que estaba junto con Manuel para dar dos besos al seguidor mientras que aseguraba que no iba a decir nada respecto a cómo está su relación con Olga por la presencia de su hermano David.
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