MADRID, 2 Feb. (CHANCE) -
La boda de Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo sigue dando mucho que hablar, y es que este es uno de los acontecimientos más importantes del año dentro del mundo de la realeza. La boda se está celebrando en el ambiente más exclusivo y "chic" de la "yet set".
La ceremonia tuvo lugar ayer 1 de febrero y según publica Hola.com la novia llegaba a la capilla como una novia de las nieves, con una capa con capucha ribeteada de piel y la tiara Fringe de Mónaco, dispuesta a contraer matrimonio por segunda vez con el hijo de Carolina de Mónaco.
La ceremonia religiosa se ha celebrado en la preciosa capilla dedicada a San Nicolás de Myra, iluminada con cientos de velas y decorada con flores blancas procedentes de París, una decoración que hacían de la celebración un "cuento de hadas". A las siete de la tarde entraba Andrea a la capilla, vestido de frac del brazo de su madre, la princesa Carolina, seguido de sus hermanos: Carlota y su esposo, el prícipe Alberto; Pierre, junto a su novia, la condesa Beatrice Borromeo y por último la pequeña de la familia Alejandra de Hannover.
LOS INVITADOS
Han sido 300 invitados los que han podido disfrutar de la romántica ceremonia, los votos matrimoniales y el beso de los recién casados, mientras de fondo se escuchaba el Ave María de Schubert entonada por el órgano más antiguo del cantón.
Algunos invitados han aprovechado la ocasión para subir fotos a las redes sociales, donde se les puede ver disfrutando del paisaje espectacular y de las bajas temperaturas en Gstaad. Como en el caso de Macarena Gómez que aprovechó las redes sociales para inmortalizar estos momentos.
En los momentos previos a la boda también se utilizaron las redes sociales y es que algunos como Fabiola Beracasa y Margherita Missoni aprovecharon Instagram para mostrar los preparativos de la boda.