MADRID, 23 Oct. (CHANCE) -
Santiago Segura ha interpretado un nuevo papel en su vida, el de mediador en la batalla entre Belén Esteban y Jesulín de Ubrique. El director de Torrente 5 visitó una vez más el plató de Sálvame para defender a su amigo y compañero de rodaje. Algo que a Belén no le gustó mucho, por el simple hecho de que se siente suplantada por Jesús y Campanario en el 'corazoncito' de Santiago Seguro, director que confió en ella en Torrente 4.
El actor y director intentó intermediar en su conflicto afirmando: "Andrea les tiene cariño a ellos (Jesulín y María José Campanario); me gustaría que Belén y Jesús se lleven bien y lleguen a un acuerdo; él te quiere. Firmar la paz y convertiros en un ejemplo para otras parejas". Unas palabras a las que la colaboradora no dudo en contestar: "Claro, me quiere muerta; rencor le tendría que tener yo que no se ha preocupado de su hija".
Muy molesta, la 'princesa del pueblo' comenzó a llorar. Santiago quiso calmarla para que dejase de llorar, pero nada podía devolverla la serenidad: "No me arrepiento de nada de lo que he dicho de Jesús porque en 15 años ha venido dos años a ver a su hija. Si Jesús hubiera llevado a su hija al estreno, mi hija hubiera estado feliz", para ratificar: "Volvería a hablar de todo lo que he hablado; me duele que Santiago haya dicho que Jesús llamó a su hija porque no fue así y mi hija si Jesús le hubiera llamado, hubiera ido".
A pesar de las duras palabras, Belén afirma no tener nada en contra del director: "Jesús es un manipulador, no tengo nada contra Santiago; como padre es un desastre, a lo mejor con los otros hijos no, pero con mi hija sí; me duele porque Jesús no llamó a mi hija; tampoco es cierto que mi hija llamara a su padre para desearle suerte, así que no se ponga medallitas porque a mi hija no la llamó", y muy dolida terminó diciendo: "En tres meses que estuvo en Madrid no fue a recoger a su hija al colegio; mi hija cuando quiera va, la relación está mejor y ya está".
Unas palabras que conmovieron a Santiago Segura que terminó besando a la 'princesa del pueblo' y mostrándole todo su cariño.