MADRID, 28 Nov. (CHANCE) -
Terelu Campos decidió abrir anoche su corazón a Sálvame Deluxe. Después de vivir uno de los años más duros de su vida, y a punto de terminar este 2015, la hija de María Teresa Campos habló sin tapujos de cómo son sus sentimientos y sensaciones ahora que ha dejado atrás muchas cosas.
Los encargados de entrevistarla no fueron los colaboradores habituales, sino otros mucho más especiales para ella. Kike Calleja, Rocío Carrasco, Mila Ximénez y Raúl Prieto, director de Sálvame.
Una noche de emociones donde el tema de la muerte de su tía Araceli afectó mucho a Terelu. Para ella la hermana de su madre era casi como su hermana porque solo se llevaban ocho años de diferencia. Un dolor descrito como incomparable con cualquier otro sentido con anterioridad, sobre todo por la rabia, incomprensión e injustia que sintió ante la inesperada muerte.
Este suceso ha dejado a Terelu confundida y sin un rumbo fijo en la vida: "Ahora mismo no sé muy bien cuál es el rumbo de mi vida". Y es que ella se veía con 50 años de otra forma a la que se encuentra, con una pareja estable y quizás más hijos: "Con 50 años me veo mayor, gorda y fea"
Para Terelu el amor nunca ha estado de su parte: "¿Qué busco en el amor?", es la gran pregunta que se hace a sí misma. Tras su última ruptura con José Valenciano -con el que se veía pasando por el altar- el corazón de la colaboradora de Sálvame se encuentra huérfano, eso sí, ayer confesó que había tenido un affair con su compañero Kike Calleja. Una breve relación que terminó por decisión de ella.
A sus problemas con las relaciones se suma su bajo autoestima. Mila quiso saber si este bajón anímico está motivado por las exigencias que ella misma se atribuye al tener el apellido que tiene: "Siempre intento hacerlo bien y hay veces que no lo hago suficientemente bien", explicaba. Además, Terelu aseguró que sus complejos le provocaban "un conflicto consigo misma".