MADRID, 13 Jul. (CHANCE) -
Diego Matamoros y Estela Grandes se han dado el 'sí, quiero' durante la tarde del pasado viernes 13 de julio en una romántica finca situada en la localidad madrileña de El Escorial. Sin lugar a dudas todas las miradas estuvieron centradas en si Kiko Matamoros acompañaría o no a su hijo Diego en este día tan importante en su vida.
El novio acudió a la Finca donde tuvo lugar el enlace acompañado por su hermana Laura Matamoros, madrina de la ceremonia, en un coche de época y a toda velocidad con el objetivo para guardar la exclusiva.
Sin embargo, no acudieron muchos rostros conocidos. Retransmitido por Sálvame en riguroso directo, Rafa Mora se trasladó en tren hasta El Escorial puesto que la cantidad de coches en la carretera en plena 'operación salida' no le permitiría llegar a tiempo al enlace.
Nacho Montes quiso pararse a hablar con la prensa a la entrada de la Finca. El periodista acudió a la boda con Benji Aparicio como copiloto, el cual no ha querido desvelar si su hijo Matías estaría o no presente en este día tan especial para la familia.
Según ha informado Sálvame, la entrada de los novios en la ceremonia fue a ritmo de música de violín y posteriormente los amigos y familiares procedieron a la lectura de textos. A continuación, se sirvió un cocktail a todos los invitados e inmediatamente después, la novia lanzó el ramo siguiendo la tradición.
Sobre las diez de la noche pasaron a la zona donde se llevó a cabo la cena y donde, antes de degustar una deliciosa crema acompañada de solomillo, brindaron a la par que Diego interpretaba una canción mexicana. Entre plato y plato, un DJ amenizó la noche acompañado por los trucos de magia del Mago Scott.
Según datos filtrados por este mismo programa, como no podía ser de otra manera, Estela y Diego cortaron juntos la tarta nupcial y posteriormente pasaron al momento más esperado por los invitados de cualquier boda: la barra libre y la música que duró hasta las cinco de la mañana.