MADRID, 28 Sep. (CHANCE) -
Se adoran, son muy buenos amigos y se apoyan el uno al otro, pero son contrincantes cuando de rugby se trata. El príncipe William y el príncipe Harry acudieron al encuentro entre Gales e Inglaterra que se disputó el pasado sábado, 26 de septiembre, en el estadio Twickenham de Londres.
El primogénito del príncipe Carlos, vicepresidente de la Asociación de Rugby de Gales, se mostró entusiasmado con la enorme remontada de Gales frente a Inglaterra, que a pesar de las muchas bajas entre sus estrellas, logró imponerse por un 28 a 25 en el marcador.
El gran derrotado fue Harry, que animó de principio a final del encuentro a los hombres que dirige Stuart Lancaster. Por cierto, no debió afectarle mucho la derrota por la sonrisa que lucía esta mañana en la Escuela Militar del Duque de York, donde hizo entrega de las medallas a los estudiantes.
En cualquier caso, los hermanos y la princesa disfrutaron de lo lindo del partido, de la remontada y del ambiente que crearon las 82.000 personas que abarrotaron la catedral del rugby. Por las imágenes que captaron los fotógrafos, el matrimonio se mostró muy cariñoso, sonriente y confidente durante el juego. La cara de Harry era un poema ante la derrota de su equipo.