MADRID, 19 Ago. (CHANCE) -
Durante la infancia, la dentición temporal da paso a la permanente. Sin embargo, los dientes no siempre se acomodan como uno quisiera. Un problema estético común en la dentadura es el diastema. Este término hace referencia al espacio que se produce entre dos piezas adyacentes. Aunque dicha separación puede estar presente en cualquier parte, es el diastema entre los dos incisivos frontales superiores (al ser el más visible) el que produce mayor incomodidad.
¿Cuáles son las principales causas del diastema?
Por lo general, la separación entre los dientes se debe a diferentes factores. La buena noticia es que existen métodos avanzados, como los alineadores transparentes de Angel Aligner, que permiten corregir el diastema.
Pero antes de hablar de la solución para el diastema, veamos cuáles son las principales primera causas de este problema:
- Las piezas dentales son más pequeñas de lo normal, lo que les impide ocupar todo el espacio disponible en la mandíbula.
- La mandíbula tiene un tamaño superior al promedio, lo que ocasiona huecos entre dientes de tamaño normal.
- Los dientes no están en posición recta o están desalineados.
- Un crecimiento excesivo de los frenillos labiales, es decir, de los tejidos que separan la encía y el labio.
- Un reflejo de deglución inadecuado, en el que la lengua presiona constantemente los dientes delanteros, produciendo una separación gradual.
- Hábitos inadecuados, como chuparse el dedo, empujar la lengua contra el paladar o presionar contra los dientes la bola metálica de un piercing para la lengua.
- El aflojamiento de piezas a causa de una periodontitis, enfermedad que daña el tejido blando alrededor de los dientes.
¿Cómo corregir el diastema?
Los avances en estética dental de los últimos años permiten disponer de una variedad de procedimientos para corregir la separación entre los dientes. Veamos cuáles son los más comunes:
Ortodoncia metálica. Consiste en usar brackets, una serie de piezas metálicas que se adhieren a los dientes y se unen entre sí con un arco de metal debidamente tensado. Con el paso de los meses, la constante presión que ejercen los brackets sobre los dientes hará que estos se vayan acercando y la separación entre uno y otro se vaya reduciendo.
Ortodoncia invisible. Tiene el mismo propósito que la ortodoncia metálica: alinear y juntar los dientes. Sin embargo, a diferencia de la alternativa tradicional, la ortodoncia invisible recurre a aparatos transparentes que además se pueden retirar para comer y realizar la higiene dental. Tal es el caso de los alineadores de Angel Aligner.
Carillas. Se trata de finas láminas hechas de composite o porcelana que se colocan en la parte frontal del diente para modificar su tamaño, forma y color. Este tratamiento mínimamente invasivo es ideal para corregir el diastema ocasionado por piezas dentales con un tamaño inferior al promedio.
Coronas. Al igual que las carillas, permiten cambiar las dimensiones y aspecto de los dientes. La diferencia es que las coronas cubren las piezas por delante y por detrás, como una especie de funda.
Adhesión. Este tratamiento implica el uso de resina para rellenar los huecos entre dientes que son demasiado pequeños.
Frenectomía. Consiste en una cirugía menor que elimina el tejido sobrante del frenillo. Se requiere solo en los casos en los que el diastema es ocasionado por un crecimiento excesivo de los frenillos labiales. Una vez realizada la frenectomía, quedará un espacio vacío entre los dientes que puede corregirse mediante algunos de los métodos antes descritos.
La elección de un método u otro depende de los gustos, circunstancias y hasta el presupuesto del paciente. Acudir a una clínica dental especializada en la diastema es la mejor manera de obtener la asesoría sobre el tratamiento (o tratamientos) más adecuado para cada escenario. Está claro que el diastema es un problema completamente tratable. Así que nadie debería estar condenado a ocultar su sonrisa por siempre.
(Información remitida por la empresa firmante)