MADRID, 14 May. (CHANCE) -
El Festival de Cannes es uno de los más prestigiosos festivales de cine a nivel mundial, pero visto lo visto en su alfombra roja, puede ser también considerado uno de los grandes festivales de la moda. Esta edición 2016 tiene una clara protagonista fashion: Blake Lively.
La nueva musa de Woody Allen lleva acaparando titulares y flashes desde que pisara la red carpet por primera vez este año junto al icónico director y a Kristen Stewart. La esposa de Ryan Reynolds, embarazada de apenas unos meses, eclipsó al equipo de Café Society con un espectacular mono rojo firmado por Juan Carlos Obando.
Pero, sin duda, su aparición más espectacular ha sido durante la segunda jornada del festival. El alter ego de Serena van der Woodsen pisó la alfombra roja cual Cenicienta moderna (aunque fue Julia Roberts la que perdió los zapatos) con un impresionante vestido de Alta Costura de tul y volantes en tonos celestes firmado por Vivienne Westwood.
La parte superior del vestido consistía en un entallado corpiño que realzaba su figura con detalles florales en relieve y un discreto lazo a la espalda. El diseño decía todo por sí mismo y la actriz lo acompañó con discretos accesorios: manicura plateada, una discreta pulsera y un moño deshecho coronado por una elegante diadema y un maquillaje muy natural. Desde luego el mejor look que ha desfilado por Cannes hasta ahora.