MADRID, 21 Nov. (CHANCE) -
Sabe muy bien lo que quiere y gracias a ello, y a mucho trabajo claro, ha conseguido hacerse un hueco en el mundo de la moda y convertirse en poco tiempo en una diseñadora de renombre.
A pesar de ser un descubrimiento en cuanto a diseñar se refiere, Victoria Beckham siempre muestra ante las cámaras su lado más serio sin perder el control en ningún momento. Difícil es verla sonreír, aunque gracias a su marido David Beckham pudimos ver una fotografía de la diseñadora riendo como nunca antes habíamos visto. Eso sí, una cosa tiene clara: su pose.
Cuerpo erguido, un poco ladeado hacia la derecha y una pierna siempre colocada más hacia adelante que la otra. Si lleva abrigo o alguna prenda con bolsillos la regla es meter la mano en uno de ellos, y si no lleva, la mano la coloca estratégicamente sobre su pierna adelantada. Una pose muy estudiada de la que no se apea.
Podemos ver multitud de fotos de la ex Spice Girl que todas, bueno casi todas, son iguales. Le de igual estar sola o acompañada en un photocall o que la pillen en algún desfile o una fiesta, ella se aferra como un clavo ardiendo a su mejor pose. Está claro que sus motivos tendrá y viendo lo presumida que es será cuestión de aparecer siempre perfecta.