LOS ANGELES, 13 Feb. (EUROPA PRESS - Sandra del Caño Morales)
El estadio de los Lakers en Los Angeles se vistió de luto para vivir la gran ceremonia de entrega de los Grammy 2012. Una gala que, sin duda, se ha caracterizado por la emoción al haberse celebrado unas horas después de conocerse la muerte de la cantante de El Guardaespaldas.
El otro gran nombre protagonista de la noche fue el de Adele. La gran artista se coronó como la reina de los Grammy 2012 al llevarse a casa seis de los galardones. Además, haciendo gala de su sensibilidad, la cantante apareció luciendo un precioso vestido negro de strass, como homenaje a Whitney Houston.
El look de Adele estaba compuesto por un traje de manga francesa, repleto de lentejuelas negras y una capa de malla. Además, el vestido iba ceñido a la cintura por un detalle y estaba firmado por Giorgio Armani, el mismo diseñador que eligió Rihanna.
La cantante de Barbados puso el toque sexy en los Grammy con un vestido negro de infarto. Totalmente ajustado a sus curvas, con escote prominente, vertiginosa abertura en la falda, espalda al aire y corte sirena, la rubia artista subió las temperaturas de la gala hasta lo más alto de los termómetros.
Otras que también quisieron vestirse de luto fueron Lady Gaga con uno de sus extravagantes modelitos a base de rejilla que le tapaba hasta la cara; Gwyneth Paltrow, con un sencillo y súper elegante vestido de escote halter y cinturón dorado.
Finalmente, Alicia Keys optó por un simple traje de cortes rectos a la altura de la rodilla que adornó con un original maxi collar de oro con forma de pico. Especial interés acaparan sus zapatos que tan solo recubren una parte de los dedos.
PARIS HILTON, TAYLOR SWIFT, KATY PERRY Y KELLY OSBOURNE, LAS DAMAS DE ORO
A parte de las que decidieron rendir su sentido homenaje a Whitney Houston, también están las que se niegan a ir vestidas de otra cosa que no sea de princesitas. Tal es el caso de Paris Hilton quien apareció con un precioso vestido blanco con bordados de hilo dorado y cinturón fino a juego.
Kelly Osbourne eligió un espectacular vestido asimétrico recubierto de lentejuelas en tono champagne, mientras que Taylor Swift se decantó por el color oro en un impactante traje largo de cuello mao y bordados art decó en el bajo de la falda.
Katy Perry lució dos modelitos y uno de ellos, de Gucci, estaba compuesto por pedrería dorada, escote halter y súper ceñido al cuerpo.
Kelly Rowland se enfundó en un vestido color nude con cuerpo de detalles florales en plata y una capa semitransparente. Carrie Underwood causó sensación con un sencillo traje de cuello cerrado y manga larga en blanco y negro.
Por último, vimos a Kate Beckinsale, una de las pocas que se atrevió a ir de corto. La actriz eligió un minivestido drapeado con escote asimétrico en blanco roto y detalle de lazo negro adornando uno de los hombros.
FERGIE Y NICKI MINAJ FALLAN EN SU ESTILISMO PARA LOS GRAMMY
No pudieron hacer otra cosa que llamar la atención y no por su elegancia y saber estar a la hora de pisar la alfombra roja de los Grammy, sino todo lo contrario.
Por un lado, Fergie se arriesgó demasiado con un traje de encaje y transparencias en naranja que dejaba ver perfectamente su ropa interior. Además los aretes de oro que lució la cantante tampoco le favorecían en absoluto.
Otra que tal baila fue Katy Perry y su vestido azul cielo con cristalitos incrustados. Quizá intentó ir a juego con su color de pelo, pero no nos ha convencido. Y para qué hablar de Nicki Minaj y su imposible look en rojo.
Finalmente, tenemos a Jessie J. con un diseño de lo más futurista en tono metalizado.