MADRID, 11 Dic. (CHANCE) -
Después de muchos días encerrada en el estudio de grabación, Rihanna ha hecho su reaparición en un acto público deslumbrando. La ganadora de ocho premios Grammy eligió un vestido palabra de honor y una capa de seda en tonos crudos de Dior Haute Couture en el segundo Diamond Ball, celebrado en Barker Hanger de Santa Mónica (California) a favor de su Fundación Clara Lionel.
El estilismo elegido por la de Barbados para esta ocasión no podía pasar inadvertido, no solo por tratarse de un modelo de alta costura de la firma francesa, sino por la larga abertura en la pierna y el amplio escote, además de los accesorios, incluidos el largo chal a juego, el collar, los pendientes y el anillo de diamantes.
La cantante de 27 años fue la anfitriona perfecta de este encuentro solidario, conducido por el comediante Kevin Hart y con la presencia de rostros muy conocidos de Hollywood, como Will y Jada Pinkett Smith, pletóricos después de conocerse la nominación de él a los Globos de Oro; Kylie Jenner, que fue acompañada de su novio Tyga; Zendaya y Emily Ratajkowski. La velada fue amenizada musicalmente por el veterano Lionel Richie. "Es abrumador ver a muchas de las personas que me importan unidos para apoyar una causa que es cercana y especial en mi corazón", comentó la estrella musical a la revista People.
El 2016 arrancará con muy buen pie para la artista, que prepara ya el show de su primera colección para Puma, que será presentado en la New York Fashion Week, que se celebrará en febrero. Las entradas para ver el desfile rondan la friolera de 15.000 dólares y todas las ganancias serán también destinadas a su organización. "Con cada dólar recaudado, podemos continuar con nuestra misión de mejorar las comunidades a nivel mundial a través de la salud, la educación, las artes y la cultura", afirmaba recientemente la diseñadora y empresaria.