MADRID, 23 Jun. (CHANCE) -
Esta semana es una de las más importantes en la vida de la Infanta Cristina y es que según apunta El Mundo, este miércoles será el día en el que el Juez Castro decida si mantiene la imputación de la hermana del Rey y la acusa de blanqueo y delito fiscal o finalmente se queda fuera del caso.
Cuatro años después de profundas investigaciones y centenares de interrogatorios, el Juez Castro decidirá si finalmente la Infanta Cristina acompañará a su esposo Iñaki Urdangarín en el banquillo de los acusados. Con el cierre de la instrucción del Caso Nóos finalmente se decidirá para cuales de todos los treinta imputados hay base suficiente para que puedan ser acusados formalmente. Siempre que ninguna de las partes solicite ninguna diligencia nueva, finalmente el juez dictará el conocido como auto de transformación a procedimiento abreviado.
Para el Duque de Palma, la acusación pública contempla solicitar entre 10 y 19 años de cárcel por la acusación de un delito de malversación, prevaricación, falsedad documental, fraude a la administración y dos delitos fiscales, aunque la pena exacta dependerá de si tanto, Iñaki Urdangarín como Torres, devuelven los cerca de seis millones de euros de los que se apoderaron de las Administraciones públicas.
Pero hasta que la Infanta Cristina reciba la resolución del juez, sigue llevando su vida con normalidad en Ginebra y la hemos podido ver esta misma mañana salir de su domicilio para ir a trabajar. Aunque la semana pasada viajó a Madrid para la Proclamación de su hermano, Felipe VI, se vio obligada a ver el acto desde la televisión de Zarzuela ya que ha preferido mantenerse al margen de cualquier celebración. A pesar de esto la Infanta no está pasando por sus mejores momentos y es que han sido sus propios amigos los que han revelado que "se siente abandonada y psicológicamente hundida".