MADRID, 20 Feb. (CHANCE) -
Primer compromiso de la semana para la Reina Letizia, que justo después de la escapada en solitario del Rey Felipe VI a Baqueira Beret con amigos, y mientras la Princesa Leonor celebra en Zaragoza el 142º aniversario de la Academia General Militar en la que está realizando su formación castrense, se ha desplazado hasta Salamanca para asistir a dos actos que reafirman su apoyo incondicional a la cultura.
El primero de ellos, presidir la presentación del proyecto “Ciudad del español”, que surge con la intención de innovar, actualizar, mejorar y reforzar la imagen de la ciudad castellano-leonesa como destino idóneo para el aprendizaje del español.
Y a continuación, visitar la exposición del legado de la escritora Carmen Martín Gaite que se conserva en el Centro Internacional del Español de la Universidad de Salamanca (CIE-USAL), en el marco de la proclamación del premio “Arte 2024” de la Fundación Princesa de Girona -sustituyendo así a su hija mayor, que continúa centrada en su formación en las Fuerzas Armadas- en la segunda etapa del “Tour del talento” tras su paso por Lleida.
Lejos de los look 'working girl' que ha escogido en sus últimas apariciones, la Reina Letizia ha apostado por un estilismo elegante y romántico a más no poder, protagonizado por el vestido verde esperanza con el que logró eclipsar a Mary de Dinamarca en su visita oficial a Copenhague el pasado noviembre.
Cuatro meses después, su Majestad ha dedicido rescatarlo de su vestidor y lo ha lucido por primera vez en España, dejándonos verlo por fin de cerca y apreciar al detalle uno de los diseños más favorecedores que ha estrenado doña Letizia en los últimos tiempos.
Por su color, en un verde esmeralda que no es de los más utilizados por la Reina -a pesar de que destaca sus ojos-, y por ser de una firma low-cost 'made in Spain' que también es una de las más utilizadas por la Princesa Leonor, Dándara. Un vestido midi que tiene un precio de 79.90 euros y que destaca por su cuello perkins, su escote lágrima, sus mangas abullonadas y una caída que se ajusta a la perfección a la silueta de doña Letizia, que hoy nos ha vuelto a conquistar.
Un diseño versátil, delicado y muy favorecedor que ha complementado con el abrigo de paño tipo batín en color cámel que también escogió en su visita oficial a Dinamarca tras la publicación de las imágenes del ahora Rey Federico con Genoveva Casanova, con unos salones de piel de tacón sensato al tono -nos encanta la combinación con el verde-, su inseparable anillo de Coretterno y los pendientes de oro rosa, diamantes y una esmeralda en forma de lágrima de la firma 'Gold& Roses' que simulan ser un doble piercing.