MADRID, 9 Ene. (CHANCE) -
Correcta y con un toque muy british en sus looks, Kate Middleton es una de las mujeres más admiradas en el mundo por su forma de vestir. En su armario abundan piezas de McQueen o jenny Packham, pero sus vestidos no son los únicos que despiertan curiosidad, también sus zapatos.
El interés por los zapatos de la duquesa de Cambridge comenzó en 2012, cuando se calzó por primera vez sus LK Bennet fetiche. Durante los días que duraron los actos del Jubileo de Diamante de la Reina Isabel II y en su tour por Canadá y EE.UU., no se bajó de unos salones nude con ligera plataforma que cuestan 225 euros y que suele usar en verano. Son el complemento perfecto a sus looks por su color: combinan con todo, además, al no ser muy altos (10 centímetros de tacón y 1,2 de plataforma) resultan muy elegantes.
Aunque a Isabel II no le gusten sus cuñas, en verano las usa a diario. "La reina Isabel no es fanática de los wedges, no le gustan y eso es algo bien sabido por las mujeres de la familia", comentó una fuente a comenta una fuente a Vanity Fair.
Kate Middleton adora las de Stuart Weitzman y que además están fabricadas en Elda, Alicante. Tiene diferentes modelos: tipo salón en azul marino y perfectas ahora cuando quiere ir cómoda pero femenina, y sandalias, también en color nude y que combina tanto con pantalones como con vestidos.
En invierno, cuando no opta por sus Jimmy Choo negros de 12 centímetros y valorados en 540 euros, suele usar unas botas de ante, planas y negras de Stuart Weitzman u otras con tacón de Aquatalia que llevó este otoño en su viaje a Escocia y que combinó con un abrigo azul klein.