MADRID, 15 Abr. (CHANCE) -
Televisión Española estrena su serie Acacias 38, una serie ambientada en un barrio burgués de finales del siglo XIX que llega a las sobremesas pero que esta noche se estrena en La 1 a las 22:00 con varias tramas que resolver y un reparto encabezado por Sheyla Fariña, Roger Berruezo y Sara Miquel y Jaime Olías que también aparece.
Como en todas las series hay una 'mala malísima', Cayetana, un bella mujer casada con el médico que intentará hacer la vida imposible al resto de personajes y CHANCE ha hablado con ella. Sara Miquel, es la encargada de dar vida a la villana de Acacias. La actriz de treinta años, llega de hacer varios musicales, entre ellos Marta tiene un marca pasos y Más de cien mentiras. Comenzó de pequeña como bailarina y fue siguiendo su carrera hasta matricularse en dirección de cine. Ahora esta catalana, como protagonista de una serie diaria y de época, espera hacerse un hueco en televisión.
CH: ¿Qué tal te lo estás pasando haciendo de Cayetana, la mala de la serie?
SM: Me lo estoy pasando muy bien haciendo de mala malísima, este personaje es un bombón, tiene muchos matices, altibajos, es un animal encerrado en un corsé y como actriz es una pasada. Cayetana es una persona de puertas para fuera y otra de puertas para dentro.
CH: ¿Y cuál es la verdadera Cayetana?
SM: La de casa. Todos tenemos una fachada que no tiene por qué ser mentira pero es la parte más protegida de uno, pero dentro de casa Cayetana saca su parte más visceral, es una fiera y tiene mucho carácter. Con el tiempo se ve porqué Cayetana se permite estallar de esa manera que no es propio de una mujer de su clase. Su máxima es el equilibrio, todo tiene que estar limpio y bonito y esa apariencia se rompe cuando llega Manuela.
CH: Pero no cae mal... ¿Por qué crees que es?
SM: Bueno ya veremos, igual me escupen en el metro (ríe). Cualquier persona en ciertas circunstancias puede llegar a ser muy mala. Yo no la defiendo pero la entiendo, ese pronto también le podía sacar yo.
CH: ¿Te identificas con ella?
SM: Sí, igual queda mal que lo diga. No soy una mala persona pero entiendo que ella quiera defender lo suyo como una leona. En ese sentido la entiendo pero las herramientas que utiliza para hacer daño son tremendas. Lo que la hace mala es que se divierte haciéndolo. Mi personaje va a generar un amor odio. Yo también soy muy seca, a veces tengo un impulso que puedo parecer estúpida y borde, en eso soy como Cayetana, menos mal que vivo sola con mi perro (ríe).
CH: ¿Cómo está siendo el rodaje?
SM: Llevamos un par de meses rodando. Ha sido muy intenso, es una serie diaria, con muchas secuencias, cuando llegas a casa te toca estudiar y además mi personaje es muy pesado, habla mucho. Vas cogiendo el ritmo pero a veces los cables se cruzan.