MADRID, 27 Mar. (CHANCE) -
En medio de unos meses muy convulsos en su vida a nivel personal tras su polémica ruptura con José Manuel Díaz Patón, Agatha Ruíz de la Prada disfrutar de un viaje muy especial de la mano de 'Universo Calleja' en el que ha visitado Nepal y ha descubierto algunas de sus tradiciones más arraigadas. Con la naturalidad que le caracteriza, la diseñadora reconocía ante Jesús Calleja que su faceta como abuela es una de las que más le gustan."He tenido una nieta, yo soñaba mucho con ser abuela, llevo treinta años queriéndo ser abuela" reconocía asegurando que está en "un momento de cambio brutal".
En medio de un proceso muy reparador y a la vez complicado para ella en el que ha puesto por escrito gran parte de su vida, Agatha reconocía que en sus memorias habla de dos momentos que no había hablado antes como son los dos abortos que tuvo o el suicidio de su madre. "Tenía miedo de que 'el innombrable' me parara el libro porque yo contaba mucho, pero justo para que no me metiera a la cárcel, mirado por abogados. Lo escondía debajo del colchón, en una maleta cerrada porque no le dije a nadie esto, ni mis hijos lo sabían" reconocía.
Aunque Agatha y Pedro J. Ramírez ponían punto y final a su matrimonio en 2018 tras más de 30 años juntos y dos hijos en común, la diseñadora no tenía buenas palabras para él explicando que se ha mudado a tan solo un portal de su casa por lo que cada vez que se acerca a su domicilio ya va "agobiada" por si se lo encuentra. "No, que asco" sentenciaba cuando Jesús le mencionaba la idea de que pudiera seguir enamorada del periodista. "He tenido la suerte de que nunca me le ha encontrado" sentenciaba.