MADRID, 28 Feb. (Por Alba González) -
Alexandra Jiménez vuelve a la gran pantalla rodeada de jóvenes promesas con 'Promoción Fantasma', de los directores de 'Spanish Movie'. La rubia actriz protagoniza esta película en la que interpreta a una directora de instituto. Esa época, dice no recordarla con excesivo agrado aunque allí hizo grandes amigos que todavía hoy la acompañan y 'la sufren'.
Con este film regresa así a la comedia tras su fracaso en la serie 'Cheers', aunque pronto volveremos a verla en televisión con un proyecto del que no ha querido hablar nada.
Además, la actriz nos desvela su lado más oculto y confiesa que es una actriz insegura y muy crítica consigo misma.
- ¿Cómo ha sido la experiencia de interpretar a una directora de instituto? ¿Te has basado en alguna o has recordado a alguna?
- No, la verdad es que no. Pedía una cosa muy concreta porque es un personaje que vive con muchísima ansiedad la situación que vive. Está al mando de la dirección de un colegio que fundó su padre, su padre murió y ella siente la responsabilidad de sacarlo adelante, a pesar de que hay muchas cosas que no puede controlar. Vive las pretensiones que dejó su padre, no de las suyas. El gran fantasma de ella durante toda la película, es su padre. Y no, no conozco a nadie en esta situación. (Risas)
- ¿Crees en los fantasmas?
- Sí, definitivamente, sí. Creo, no porque haya visto nada, pero me cuesta mucho creer que hay sólo lo que vemos. No lo concibo.
- ¿Has tenido alguna sensación extraña o paranormal?
- Sensaciones he tenido muchas, pero no tengo ninguna evidencia de nada. Cada uno interpretamos los cambios energéticos o las sensaciones de distinta forma. Algunos dirán que son corrientes de aire y otros, pensamos de otra manera. Cada uno coloca las experiencias y les da la explicación que consideren.
- En tu carrera has sido estudiante, profesora y directora. ¿Cuál te ha gustado más?
- (Risas) He disfrutado con todas las etapas, la verdad. Me identifico con todos los personajes, es mi trabajo, e intento sentir como sienten esos personajes porque de alguna forma es una versión de algo que podrías ser tú.
- En la película no eres una directora que mande muy bien. En tu vida diaria, ¿eres una buena mandona o no te gusta mandar?
- No me gusta nada mandar y hago siempre lo que me da la gana. Mando mucho sobre mí misma y me molesta mucho que me digan lo que tengo que hacer. Por otro lado, no me gusta imponer mis cosas a los demás. Prefiero la independencia y la gente que hace lo que le da la gana, siempre que no haga daño a alguien.
- ¿Cómo ha sido trabajar con Raúl?
- Nos lo hemos pasado como enanos los dos. Hemos jugado mucho con esos elementos que tienen los personajes. Son personajes que se atraen porque los dos están muy locos y son muy excéntricos. Hemos conectado genial. Tenía la intuición de que nos iba a ir muy bien juntos, pero no hasta el punto de entendernos como nos entendemos y luego, haber disfrutado y entender esta profesión de la misma forma.
- Esta es tu quinta película, todas ellas con un tono cómico. ¿Tienes ganas de cambiar de registro?
- El drama me apetece muchísimo. No me puedo quejar porque me he pasado un año en 'La pecera de Eva' contando un drama muy intenso. Y me encantaría pasar eso a cine.
- ¿Cómo llevaste el fracaso de 'Cheers'?
- Pues bien, en este trabajo siempre cuentas con estas cosas. Los proyectos pueden funcionar muy bien, regular o no funcionar. No sé cuál fue el fallo, si lo supiera, sería una productora ejecutiva de mucho éxito. La receta no la conoce nadie, y también esto es lo emocionante de este trabajo. Tú no sabes nunca que te va a pasar, pero lo más inteligente es estar preparado para todo. También para las críticas, buenas y malas. No lo puedes controlar.
- ¿Cómo recuerdas tu época del instituto?
- Fatal, un horror. No volvería a ese momento nunca. Tuve una adolescencia muy agotadora. Lo recuerdo como un momento difícil. La adolescencia, creo que no es fácil para nadie. Es mejor, cuando empiezas a entenderte.
- Pero imagino que tú no serías la apartada ni la rarita, ¿no?
- No, no. Tenía mis amigos y todavía hoy lo son. Pero tampoco tuve una experiencia del instituto como tal, porque estudiaba a distancia. Eso, lo hacía todavía más difícil.
- ¿Te arrepientes de algún trabajo?
- No, creo que todo cuenta. Hay ciertos proyectos que prefieres no volver a ver, eso sí, pero al final todo encaja y tiene su por qué.
- ¿Eres muy exigente contigo misma?
- Sí, y además aspiro a relajarme cuando meta la pata o no esté fina. Es verdad, que soy muy pesada y sufro muchas veces trabajando. Este es el primer trabajo en el que no he sufrido.
- ¿Te ves bien en esta película?
- ¡No! (Risas) Como siempre...
- ¿Quiénes son tus mayores críticos?
- Yo misma, soy la peor. Luego también, los compañeros, somos muy dados a ser críticos. Como es un trabajo que queda ahí, que nunca desaparece, siempre piensas que lo podías haber hecho mejor.
- ¿Eres insegura?
- Creo que todos los actores lo somos, pero confieso que yo sí lo soy. Mucho.
- ¿Has tenido alguna zancadilla por parte de un compañero?
- No, en ese sentido ninguna.
- ¿Alguna vez piensas en estar detrás de las cámaras?
- Me gusta mucho la dirección.
- ¿Tienes algún proyecto a la vista?
- Sí, hay un proyecto de televisión pero no puedo decir nada.