MADRID, 19 Oct. (CHANCE) -
Después de que la revista 'Semana' haya revelado este miércoles que Carmen Borrego y Terelu Campos han vaciado el piso en el que su madre residió sus últimos años de vida, y han llevado algunos de sus muebles y antigüedades más valiosos a una conocida casa de subastas -algo que ya hizo en vida María Teresa Campos cuando vendió su mansión de Molino de la Hoz en 2021 y se mudó a un ático de alquiler- la menor de las hermanas se ha sentado en el plató de 'Vamos a ver' y ha hablado del duro trance que ha supuesto desmantelar el último hogar de su madre.
Algo que, asegura, "es inevitable" -y es un momento complicado por el que pasan todos aquellos a los que se le muere un ser querido-, aunque confiesa que para ella "ha sido mucho menos importante el valor económico que el de sus cosas sentimentales, que tu madre tiene hace muchísimos años, que guardó con muchísimo cariño y que siempre estarán con nosotros".
Como confiesa, lo verdaderamente "duro" fue tener que hacer la mudanza cuando su madre vendió su mansión de Molino de la Hoz -que en realidad eran dos inmensos chalets- y tuvo que desprenderse de "cosas que adquirió con esfuerzo y cariño" después de toda una vida trabajando.
"Mi madre se llevó al piso lo que ella quiso, pero en estos momentos nosotras tenemos nuestras casas montadas y no podemos meter los muebles por la puerta. Pero las cosas de mi madre, sus zapatos, su ropa, las cosas de valor emocional están repartidas entre todos nosotros, sus hijas, sus nietos e incluso hermano" ha relatado.
En los últimos días Carmen ha tenido un sueño recurrente al que no deja de darle vueltas y que este miércoles ha compartido por primera vez públicamente. En ellos, como ha contado, "estoy con mi madre recogiendo su casa y mi madre indicándome qué guardo y qué no guardo". "Y hay un mueble en concreto al que mi madre hace referencia constantemente, que por supuesto ese mueble me lo he quedado yo. Y en ese sueño veo todos los muebles de mi vida mezclados" ha contado, sin encontrar explicación a este suceso 'paranormal'.
Sin entrar en detalles sobre qué enseres de María Teresa han llevado a la casa de subastas, su hija sí ha dejado claro que además de los objetos personales más importantes para la presentadora, Terelu y ella han decidido quedarse con algunos muebles que, como ha adelantado, irán a la casa de Málaga que han heredado de su madre.
Hay algo de María Teresa especialmente importante para Carmen, y que tiene mucho que ver con el olor de la recordada comunicadora, que como ha revelado sigue impregnándolo todo "cada vez que voy a la casa de mi madre".
"Me quedo con su olor, que es maravilloso todo el día. Tengo una pashmina que siempre la estábamos tapando porque estaba muy delagada y siempre tenía frío y la llevaba siempre. Y la tengo yo y creo que no la voy a lavar nunca porque la huelo y vivo a mi madre. Esa pashima se quedará conmigo para siempre y jamás la lavaré" ha confesado muy emocionada.
Además, Carmen se ha pronunciado sobre las últimas declaraciones de Gustavo Guillermo en 'Gran Hermano', hablando maravillas de Terelu y de ella y negando que enviase un mensaje disculpándose con Edmundo Arrocet por haberse metido con él en una exclusiva en vida de María Teresa Campos.
"Gustavo va a seguir en nuestras vidas porque así lo queremos nosotras, así lo querría mi madre. La relación es laboral pero llega mucho mas allá, es sentimental, de cariño y amor... Gustavo ha cuidado a mi madre y es parte de nuestra vida, es parte de la vida de mi madre" ha zanjado, convencida de que el chofer nunca dirá nada malo ni de ella ni de su hermana.