MADRID, 2 Feb. (CHANCE) -
David de Maria se encuentra en uno de los mejores momentos de su vida, en pleno del exito profesional le ha llegado la paternidad para cambiarle la vida y reconoce que esta cada vez más enamorado de su hijo. El parto de su hijo Leonardo casi coincide con el rodaje del programa que laSexta estrena esta noche A mí manera donde el jerezano es uno de los protagonista.
CHANCE: Estuvisteis 12 días con A mí manera
David de María: Estuvimos 12 o 13 días aunque se va a resumir en 7 galas porque fueron 7 conciertos.
CH: ¿Cómo ha sido la convivencia entre tanto músico?
D.M: Toda una aventura y un experimento que no sabíamos por donde iba a salir pero que al final, como lo que ahí se vivió se refleje en un mínimo porcentaje en la pantalla, yo creo que va a gustar y va a enganchar. No es nada fácil llevarse bien con uno mismo, imagínate que te metan seis más que está igual de colgado que tú o que tenéis las mismas paranoias de los músicos, la gira, mis conciertos, uno tiene más bolos otro menos, yo sueno en la radio pues yo no... todo eso mezclado en la misma coctelera con el denominador común de las canciones pues creo que es la magia del programa: conocernos humanamente y ver que cada noche ocurre algo con un repertorio de canciones que todos tenemos en la memoria. Es un homenaje al pop-rock nacional ibérico desde los 80 hasta la actualidad.
CH: Lo que sí se te ha visto en el montaje es en algún momento con la lagrimita fuera, ¿Eres muy sensible?
D.M: Yo no he llorado en mi vida delante de una cámara pero te ves a Antonio Carmona cantando un tema tuyo con la de conciertos que yo he ido a ver a Ketama y con lo que yo he seguido a todos estos monstruos... ver a Manolo Tena, que es un mito, haciendo un tema de David de María cuando Manolo tiene la edad de mi padre... había emociones que era imposible de controlar por mucho buen rollo que hubiese, por nuestros chupitos de ron para calmar el frío y entonarnos, al final la lagrimita a mí me salió en un par de programas, tampoco te creas que tanto.
CH: Contabas antes que estaba tu mujer apuntito de dar a luz y que estabas esperando que te llamaran, ¿cómo se te ocurrió irte?
D.M: Tenía pactado con la productora que en el momento que rompiera aguas yo me piraba para Madrid, no me quería perder el momento del parto. Una oportunidad como esta a mí me pilló grabando el disco y a punto de ser padre. Me hubiera gustado haber tenido más tiempo de preparación, de preparar el repertorio, pero una experiencia como esta es para vivirla, para disfrutarla y para intentar estar al nivel de las canciones.
CH: ¿Qué tal la experiencia de la paternidad? ¿cómo está el pequeño Leonardo?
D.M: Son los siete padrinos de él porque la noche de David de María además me regalaron una cesta con muchas cosas para el bebé y como ya no hemos perdido el contacto desde que hicimos el programa todos han sabido cuando nació, cuánto pesó y si tiene gasecitos o no.
CH: ¿Cómo esta el peque?
D.M: Muy bien.
CH:¿Tú como padre cómo lo llevas?
D.M: Me ha cambiado la vida, más enamorado de él cada minuto. Mis amigos me dicen ‘vas a dormir poco’ y yo dormía poco antes de ser padre, con tanto concierto y alargar las noches torpemente, despertar y hacerle un biberón, tirarle los gasecitos o intentarlo dormir en tus brazos no hay nada igual, no hay un amor más pleno que el de ser padre y nunca olvidaré esos momento del parto. Yo soy una persona que he podido vivir muchas emociones encima de un escenario, tu carrera, una persona que vive todo muy intensamente pero el parto de mi hijo lo ha superado todo, incluso al sexo.