MADRID, 11 Feb. (CHANCE) -
Fue le pasado mes de agosto cuando la cantante y su mujer sufrían un asalto en su propiedad de madrugada mientras dormían. Un grupo de encapuchados se llevaba el efectivo, joyas y todo aquello de valor, dejando a la pareja con un susto en el cuerpo y una investigación abierta que, por fin, parece haber dado sus frutos. Ayer se hacía pública la detención de ocho personas tras realizar once registros y lo que sorprendía era la posible implicación de Antonio Tejado, sobrino de María del Monte, en el caso.
Hoy, durante la emisión de su programa 'Andalucía de Tarde', ha querido dedicar unos minutos a hablar de lo ocurrido y ha desvelar cómo se encuentra en estos momentos. Sin perder la compostura pero cogiendo la mano de sus compañeros en señal de apoyo, confesaba que estaba "mal, muy mal" y recordaba que llevan cinco meses viviendo con miedo tras haber vivido "una experiencia horrorosa que no se la deseo a nadie, yo diría, que una de las peores de mi vida".
A la espera de saber qué grado de implicación tiene Antonio Tejado, aseguraba estar "expectante" y confiando en la presunción de inocencia. También ha querido aclarar que no sabían nada acerca de la implicación del sobrino de la cantante y que estos meses han confiado ciegamente en la Guardia Civil, quien les animaba a no perder la esperanza.
En plató se comentaba que ya se dijo en su día que los ladrones tenían información privilegiada de dónde encontrar los objetos de valor e Inmaculada Casal hablaba de qué pertenencias perdieron y no han podido recuperar: "Lo sentimental, la bisutería, las cosas mejores, las cosas de tu madre, las cosas que tú te has ido comprando (...). Esos pendientes, los que te ha regalado tu padre, los que te han regalado un aniversario, la medalla de la comunión, la de tu madre, la del barro de tu abuelo...".
A pesar de ser personajes públicos, reconocía lo mal que lo han pasado y confesaba que todavía se despierta a las cinco de la mañana, como aquel fatídico día. "Ha sido una experiencia traumática, nos va a costar sobreponernos, yo todos los días me despierto a las 5 de la mañana, que es a la hora que sucedió el robo, y fue una experiencia que no se la deseo a nadie" compartía con sus compañeros.