MADRID, 4 Abr. (CHANCE) -
La noche del miércoles en Guadalix de la Sierra estuvo protagonizada por una jueza bastante dura que supo llevar muy bien los diversos juicios de la concursante de esta edición de GH Dúo. Lo más sorprendente de la noche fue cuando la acusada, Irene Rosales, hacia frente a todo lo que se había dicho de ella dentro de la casa. María Jesús Ruiz había hecho unas duras declaraciones en el confesionario donde aseguraba que antes de hablar de ella, debería de darse cuenta que está en un concurso por las deudas que le ha generado su marido.
IRENE ROSALES ASUME SU ERROR Y CONFIESA: "HE PREFERIDO NO PAGAR A HACIENDA PARA PODER TENER DINERO EN MI CASA"
La mujer de Kiko Rivera, ni corta ni perezosa, contestaba sin alterarse lo más mínimo que: "Yo he preferido, y voy a ser sincera, no pagar a Hacienda para poder tener dinero en mi casa, y ahora tengo una deuda que tengo que pagar". Lo cierto es, que no podía haberse explicado mejor. El hijo de Isabel Pantoja se quedaba atónico por las declaraciones tan duras que había hecho su compañera María Jesús y con mucha tranquilidad le respondía: "Esta señorita es una impresentable, usar lo de fuera es lamentable y rastrero".
La de Andújar, como de costumbre estuvo recibiendo palos durante toda la noche ya que tuvo que saldar las cuentas pendientes con los cuatro concursantes que quedan en la casa. Lejos de que se produjera una reconciliación con la que había sido su amiga durante todo el concurso, parece que esas declaraciones en el confesionario han provocado que se produzca punto y final a una relación que en los últimos días estaba mejorando.