MADRID 7 Ene. (Por Cristina Tiburón) -
Marta Fernández se estrena al frente de 'Las mañanas de Cuatro', un nuevo formato en el que primará la actualidad, las entrevistas y la tertulia. Las mañanas de la tele tienen nueva reina, la periodista competirá este año por la audiencia con pesos pesados del periodismo como Mariló Montero, Susana Griso o la mismísima Ana Rosa Quintana, a quien sustituyó en verano. Tenía vocación de informadora y le apasionaba contar la actualidad pero el tiempo y la experiencia le han demostrado que en el entretenimiento se mueve como pez en el agua. Ahora persigue ese justo equilibrio tan difícil de encontrar para todos.
Licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid, Marta inició su carrera profesional en el Diario 16 y tras pasar por Telemadrid, CNN+ y Cuatro se dió a conocer al gran público presentando el informativo del medio día de Telecinco, la cadena en la que descubrió ese lado más cercano y desenfadado que destapa ahora en este nuevo reto que emprende. Un programa que seguirá el hilo de la actualidad social y política, dando cuenta de los acontecimietnos de la jornada con conexiones en directo a través de un amplio equipo de reporteros que llevarán al espectador al lugar a la noticia.
- ¿Hablamos un poco de como serán a partir de ahora 'Las mañanas de Cuatro'?
- Estaremos de doce y media a dos de la tarde. El plató es una casa maravillosa que ha diseñado Blanca, es estupenda. Es un love circular desde el cual vamos a echar una mirada a la actualidad, al mundo y al día. Va a ser un programa que va a estar muy al hilo de la actualidad, al hilo de lo que pasa, del día a día, buscando siempre una mirada desde otro lado también y buscando el apoyo y el análisis de tertulianos que van a ser caras probadas en sus ámbitos y de reconocida profesionalidad. Pero también nuevas en este mundo de la televisión porque pensábamos que había llegado un momento en el que las tertulias habían llegado a ser ligeramente endogámicas las unas con las otras. Los pobres tertulianos empezaban a las ocho de la mañana en un sitio y acababan a las doce de la noche en otra, ya había que darles descanso a estas gentes y buscar caras nuevas para tener así voces nuevas.
- ¿Cómo definirías esa mirada de 'Las mañanas de Cuatro'?
- Creo que va a ser una mirada muy acorde con el estilo de Cuatro, esto creo que también se ve bastante bien en el decorado del plató y en toda la concepción del programa. Creo que va a ser una mirada fresca y hecha por periodistas, creo que es importante porque es un programa hecho por periodistas y por gente muy profesional y en el cual vamos a buscar la noticia para contarla de una forma correcta, con toda la corrección pero que sea amena. A esa hora ya no hay este tipo de magazines, son de otro tipo, más de mañana. Así que nosotros jugaremos con una ligera ventaja y es que podremos estar más en lo del día a día porque las noticias del día suceden en la franja horaria del programa precisamente, entre doce y media y dos. Será el previo al informativo donde podremos contar cuál es la noticia del día desde el momento mismo en el que empieza, por eso podremos tomar el pulso al día de una manera muy cercana más que otros programas que a lo mejor empiezan a las nueve y ya les pilla un poco demasiado pronto.
- ¿Coges el estilo de Cuatro o te llevas el de Telecinco?
- Este es un programa de Cuatro, echo para Cuatro y para el espectador de Cuatro y además por una persona que se crió a los pechos de CNN+.
- ¿Veremos a una nueva Marta?
- Yo soy periodista pero también soy una persona, soy una mujer de treinta y siete años que se acerca a los temas como nos acercamos las personas de nuestra edad, de nuestra formación y de nuestra profesión. Creo que a los temas hay que acercarse sin miedo, creo que hay que hablar de la actualidad haciéndolo sin complejos y permitirnos los lujos que no se puede permitir uno en un informativo. La clave de un programa de mañana y de un magazine es que te permite abrir mucho más el espectro y hacer la información de un modo mucho más libre, es la diferencia que habría entre un periódico y su suplemento del fin de semana. En nuestro caso se acerca más a un suplemento de fin de semana pero que tiene la base de la información, de la actualidad y de lo que pasa en el día a día. Es decir, nosotros no sólo vamos a informar, vamos a contar historias y pienso que esto es lo que desean hacer todos los periodistas, los de informativos también, y que no pueden hacerlo porque están constreñidos por el tiempo y por eso en este caso es un lujo. Además tenemos una duración de hora y media de programa que creo que está muy bien porque está muy ajustada y te permite contar lo esencial y contarlo bien, sin tener que alargarlo innecesariamente que es lo que ocurre muchas veces en los magazines.
- ¿Va a ver espacio en el programa para el corazón?
- Cuando el corazón sea noticia, si veis los informativos hay muchas noticias que clásicamente habríamos calificado del corazón y en realidad tienen más que ver con espectáculos o sociedad. Lo que se acerque a la actualidad va a tener lógicamente una cabida. Por ejemplo Belén Esteban apareció hace dos semanas en la portada del suplemento de El País y la gente se rasgó las vestiduras y todavía no entiendo porqué, porque es lo que habría hecho el New York Times, era un reportaje muy en el hilo de lo que hacen los americanos. Creo que hay que hablar de lo que está de actualidad.
- ¿Te apetecía enfrentarte a un reto como éste?
- Sí, yo creo que a un reto así no se le puede decir que no. Aunque es verdad que estaba muy bien en informativos y que me sentía muy a gusto, creo que este es un programa por el que merece la pena apostar y que además es uno de esos momentos profesionales en el que es también un regalo. Hay que aceptarlo, disfrutarlo, leerse el manual de instrucciones y aprender a usarlo.
- ¿Pesa la sombra de Concha García Campoy?
- No, creo que Concha hacía un programa que eran "Las mañanas de Cuatro", en el cual yo trabajé, y empezó siendo un magazine más al estilo de Ana Rosa, que además por horario buscaba la competencia directa con ese programa. Y después fue cambiando de rumbo y la verdad que Concha hacía maravillosamente bien la tertulia política, creo que era una maestra en ese momento y no pesa. Además pienso que cuando nos encontremos por los pasillos la pediré que me dé buenos consejos para el próximo día diez que dentro de nada me la voy a encontrar por los pasillos de Telecinco.
- Le pediste consejo a María Teresa Campos ¿vas a seguir a raja tabla lo que te dijo?
- Ella me dijo que la cabeza era muy importante pero que pasara las cosas también por el corazón. Además estoy convencida que el lunes cuando entre al plató recordaré lo que me dijo, porque que María Teresa Campos te dé un consejo, ya lo tienes que recordar para siempre. Y a Ana Rosa y a Concha no las he visto pero en cuanto las vea ya las voy a pedir todo tipo de consejos, trucos y demás.
- Este año además has dado las campanadas ¿qué tal la experiencia?
- Muy divertida y emocionante. Además era de las pocas madrileñas, incluso españolas que estaba en la Puerta del Sol porque cuando te asomabas al balcón te das cuenta que la mayoría son extranjeros. Había españoles pero la mayoría son turistas o gente que está pasando la nochevieja en Madrid. En la pausa después de las campanadas hubo sonrisas, risas, lágrimas, abrazos, fotos y casi nos pillan (risas) dándonos besos después de la primera publicidad. Estuvo muy bien, fue una experiencia muy divertida, que no diría que se la recomiendo a todo el mundo porque no es posible (risas) y que me sorprendió que me eligieran a mí para darlas porque no me lo esperaba.