MADRID, 11 May. (CHANCE) -
Un escenario natural de ensueño, Bárbate; una realidad social, la alta tasa de paro y el aumento del tráfico de drogas; un elenco coral capitaneado por Paz Vega, Stany Coppet y Jesús Castro; una colaboración estelar, como la de Antonio de la Torre; y una historia creada por Frank Ariza, originario de este pueblo gaditano, que arranca con el viaje de vuelta de una religiosa a sus orígenes en un paralelismo entre el personaje de Lucía y su intérprete, la estrella sevillana. Estos son a grandes rasgos los principales atractivos de Perdóname, Señor, miniserie de ocho episodios que ocuparán próximamente el horario estelar de Telecinco, aunque la cadena no ha querido desvelar la fecha de estreno.
Íntegra, luchadora e inteligente, así define Vega a Lucía Medina, el personaje que ha precipitado su regreso a España tras 15 años en Los Ángeles afianzando su carrera internacional. "Esta serie era un regreso también para mí porque supuso mi vuelta a España y volver a trabajar en televisión. Este proyecto me marcó y precipitó mi regreso. Quise quedarme y empezar una nueva etapa", señaló la actriz de 41 años en rueda de prensa. "Lo que vivimos esos meses como familia en España, a parte del rodaje, sentimos algo que nos hizo preguntarnos si nos quedábamos y dimos el paso. Nuestra idea era regresar en uno o dos años porque había trabajo allí", señaló la andaluza, que subrayó lo bien que han llevado sus tres hijos la adaptación a su nueva vida.
"Es una religiosa muy brillante dentro de su congregación, ejerce desde la intelectualidad y cuando siente que tiene que volver a su pueblo para saldar algunas cuentas, tendrá que pasar de la teoría a la práctica y pasará por sus momentos de duda, pero también en los momentos más difíciles se agarrará a su fe", señaló Paz sobre esta religiosa, en cuyo hábito nos confesó se había sentido muy cómoda.
Para el protagonista de El Niño, la miniserie de Gossip Event & Production también ha sido un proyecto muy especial porque le ha permitido trabajar muy cerca de su casa y en las playas donde pasaba los veranos cuando era un niño. "La experiencia de trabajo más bonita que he vivido hasta ahora y así me lo tomé, como si fuera el último proyecto de mi vida porque quizá no se vuelvan a reunir jamás estas condiciones", subrayó el joven de Vejer de la Frontera que da vida a Rafa Medina.
Stany Coppet afronta su segundo proyecto televisivo en España tras el éxito de El Príncipe y volverá a encarnar a un personaje oscuro, Bruno Lachambre, el jefe de la mayor organización de tráfico de hachís en Barbate. Un personaje que le ha permitido "viajar en la realidad de gentes, de esos pueblos donde el nivel de paro es altísimo y muchos terminan eligiendo el camino más fácil", comentó el galo. "Ha sido una experiencia tremenda y agradezco mucho a quienes apostaron por mi presencia, porque es evidente que mi acento francés puede ser un obstáculo. Todos y cada uno de los miembros del equipo me han ayudado a superar el reto de hacer este proyecto", señaló el marido de Dolores Chaplin.
"En Barbate, mi pueblo, oprimido por la crisis y por el cierre de los caladeros de Marruecos, he visto como amigos y familias pasábamos necesidades y cómo cada vez se hacía más visible la delincuencia derivada del narcotráfico", apuntó el creador. "Tenía la necesidad de contar esa historia para explicar cómo familias sin recursos han sufrido las consecuencias de esta decisión de vida al margen de la ley", añadió.
Así arrancará Perdóname, Señor
Procedente de Roma, la hermana Lucía regresa de Barbate, el pueblo que la vio nacer, tras dos décadas de ausencia. Allí se reencuentra con la dura realidad cotidiana que afrontar su familia; su hermano Miguel, pescador en paro, atraviesa grandes apuros económicos; su cuñada Antonia trabajar en una conservera sobre la que se ciernen continuos rumores de cierre; y Rafa, el mayor de sus sobrinos, trabaja para el líder de una banda de narcos, conocido como El Rojo. La detención del capo por parte de la Guardia Civil dejará al frente del grupo criminal al joven buceador. No solo tendrán que sortear a las autoridades, sino que mantendrá una guerra sin cuartel contra Bruno Lachambre, el mayor narco de la zona. Durante uno de esos enfrentamientos, Lucía, el amor de juventud de Lachambre, caerá herida