MADRID, 4 Oct. (CHANCE) -
24 horas después de que Ana María Aldón haya confirmado su ruptura con José Ortega Cano públicamente, revelando que ya no hacen vida de pareja y que es una decisión que no tiene vuelta atrás, Rocío Carrasco ha dado la estocada final al torero durante el debate posterior a la emisión del octavo capítulo de 'En el nombre de Rocío'. Dispuesta a 'desenmascarar' al maestro, la hija de Rocío Jurado vuelve a hablar de los presuntos problemas de alcoholismo del que fuera marido de su madre, al que no duda en definir como una persona "acomplejada" y "atormentada" por la fama de 'La más grande'.
Así, después de revelar en su docuserie que la chipionera quiso separarse, ahora va más allá y deja entrever que uno de los motivos por los que su matrimonio no funcionó fue por la "lucha de egos" que Ortega Cano libraba siempre con ella: "Si ella tenía 15 galas, él tenía que tener 19 corridas. Había una rivalidad de él para con ella horrorosa y yo le escuché decirle a mi madre 'que no se te olvide nunca que soy Ortega Cano'" ha contado.
"Yo siempre he vivido un ambiente de rivalidad absoluta. Mi madre lo que hacía era quitarle importancia. Yo la escuchaba decirle 'pero si tú eres un torero grandísimo, si eres un artista'" ha revelado, asegurando que a pesar de los intentos de Rocío Jurado Ortega "se veía como ensombrecido por la figura profesional de ella, por el amor que le tenía la gente dentro y fuera del escenario". "Él no llegaba a aceptar que ella lo eclipsara, pero mi madre no lo hacía para hacerle daño. Ella entraba en un sitio y lo acaparaba", sostiene.
Un 'complejo de inferioridad' que, como ha insinuado, habría traído más de un quebradero de cabeza a Rocío Jurado y habría agravado los presuntos problemas del torero con el alcohol ya que, como ha explicado la mujer de Fidel Albiac, Ortega no podía sentirse "desplazado" en presencia de su mujer. "Se daban situaciones que no debían darse nunca. Estaba preocupada su familia, estaba preocupada su madre, estaba preocupada mi madre Las situaciones podían estallar en un plis. Mi madre acudía a celebraciones pero con reparos. José gestionaba eso muy mal" ha asegurado.
Algo que ha cofirmado un amigo de la chipionera, Loren Zotano, que ha intervenido en el programa y ha revelado que "Rocío entraba en pánico cada vez que Ortega empezaba a beber".
Prueba de la tensión que se vivió en ciertos momentos, Rocío ha contado en la docuserie un episodio terrible que sucedió cuando su madre estaba ingresada en Houston: "Él estaba como ausente, desaparecía. Una vez me lo encontré tumbado en una hilera de sillas en el hospital cuando mi madre estaba preguntando por él. Algo que mi madre le reprochó, preguntándole si no le iba a respetar ni en esa situación". Tal y como ha explicado, el torero no respondió a la artista, pero al llegar al apartamento en el que se alojaban no dudó en arremeter contra ella, acusándola de estar "matando" a su madre.
Un momento tenso en el que Fidel no dudó en salir en defensa de su mujer mientras ella, como ha admitido, no paraba de llorar incapaz de responderle: "José, estamos en un piso treinta y pico. Como tú tengas la poca vida y la poca vergüenza de decirle eso a una niña cuya madre se está muriendo, nos vamos para abajo los dos" advirtió el sevillano al torero como ha revelado Rocío en su docuserie.