Kate Moss se ha tomado un respiro entre sus numerosos copromisos profesionales para ir a esquiar a los Alpes suizos, concretamente a la estación de Gstaad, muy frecuentaba por las celebrities amantes del esquí. Pero las vacaciones se le han torcido a la supermodelo, quien ha sufrido una fatídica caída que le ha provocado una rotura de ligamentos.