Raquel Bollo se enfrenta a un juicio por el que podría ir a prisión acusada de los delitos de insolvencia punible, alzamiento de bienes y obstrucción a la justicia. Una deuda que Raquel arrastra desde que perdió una demanda contra el honor en 2015 por la que fue condenada a pagar las costas, 30.000 euros, pero no lo hizo por la elevada deuda que mantiene con Hacienda y que, al negarle la posibilidad de ser fraccionada, todavía no ha pagado.