La influencer Georgina Rodríguez ha demandado a dos cadenas de televisión que habrían violado su derecho al honor y a la intimidad al destapar episodios de su vida -como su relación con su padre-, y este martes se ha celebrado el juicio en Madrid con la ausencia ya esperada de la mujer del futbolista. Un proceso judicial con el que Georgina pretende crear jurisprudencia, logrando blindar así su pasado para que no se hable de "antecedentes que no sean de interés general" porque cuando sucedieron, antes de 2017, no era personaje público. Su hermana Ivana Rodríguez sí ha acudido a la vista celebrada en los juzgados de Pozuelo de Alarcón con su pareja, el escultor Carlos García, y el abogado de Georgina, Mario Bonacho. Tras el juicio, Ivana ha revelado que todo ha ido "bien" y ha explicado que lo único que quiere su hermana es proteger su pasado y ser la dueña de su propia historia. Ha sido el abogado de Georgina, Mario Bonacho, el que ha dado más detalles sobre esta demanda con la que influencer quiere "básicamente, la tutela del derecho a la intimidad y a la propia imagen".