MADRID, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
Nuevos cálculos acreditan que las estrellas jóvenes no son los únicos objetos que poseen discos de polvo con capacidad de formar planetas: los agujeros negros también admiten estas estructuras.
"Con las condiciones adecuadas, los planetas podrían formarse incluso en entornos hostiles, como alrededor de un agujero negro", dice Keiichi Wada, profesor de la Universidad de Kagoshima que investiga núcleos galácticos activos, objetos luminosos energizados por agujeros negros.
Según las últimas teorías, los planetas se forman a partir de agregados de polvo esponjoso en un disco protoplanetario alrededor de una estrella joven. Pero las estrellas jóvenes no son los únicos objetos que poseen discos de polvo. En un enfoque novedoso, la nueva investigación se centra en discos de envergadura alrededor de agujeros negros supermasivos en los núcleos de galaxias.
"Nuestros cálculos muestran que decenas de miles de planetas con 10 veces la masa de la Tierra podrían formarse a unos 10 años luz de un agujero negro", dice Eiichiro Kokubo, profesor del Observatorio Astronómico Nacional de Japón que estudia la formación de planetas. "Alrededor de los agujeros negros, pueden existir sistemas planetarios de escala asombrosa", comenta este científico, cuyo estudio se publica en arXiv.
Algunos agujeros negros supermasivos tienen grandes cantidades de materia a su alrededor en forma de un disco pesado y denso. Un disco puede contener tanto polvo como 100.000 veces la masa del sol. Esto es mil millones de veces la masa de polvo de un disco protoplanetario.
En una región de baja temperatura de un disco protoplanetario, los granos de polvo con mantos de hielo se unen y evolucionan en agregados esponjosos. Un disco de polvo alrededor de un agujero negro es tan denso que la radiación intensa de la región central se bloquea y se forman regiones de baja temperatura. Los investigadores aplicaron la teoría de la formación de planetas a los discos circumnucleares y descubrieron que los planetas podrían formarse durante varios cientos de millones de años.
Actualmente, no hay técnicas para detectar estos planetas alrededor de los agujeros negros. Sin embargo, los investigadores esperan que este estudio abra un nuevo campo de astronomía.