El telescopio espacial James Webb de la NASA fotografió secciones de las afueras de la galaxia Vía Láctea, una región llamada Galaxia Exterior Extrema. - NASA, ESA, CSA, STSCI, M. RESSLER (JPL)
MADRID, 12 Sep. (EUROPA PRESS) -
El telescopio espacial James Webb de la NASA/ESA/CSA ha examinado los bordes de nuestra galaxia para concentrarse en una zona de formación estelar que recuerda a la Vía Láctea en sus inicios.
Los astrónomos denominan esta región Galaxia Exterior Extrema debido a su ubicación a más de 58.000 años luz del centro galáctico. A modo de comparación, la Tierra está aproximadamente a 26.000 años luz del centro.
Un equipo de científicos utilizó la cámara de infrarrojo cercano (NIRCam) y el instrumento de infrarrojo medio (MIRI) del Webb para obtener imágenes de regiones seleccionadas dentro de dos nubes moleculares conocidas como nubes Digel 1 y 2. Gracias a su alta sensibilidad y resolución nítida, el Webb pudo resolver estas áreas, que albergan cúmulos estelares en fase de formación estelar, con un detalle sin precedentes. Algunos de los detalles revelados por estos datos incluyen componentes de los cúmulos como protoestrellas muy jóvenes (clase 0), erupciones y chorros, y estructuras nebulares distintivas.
Estas observaciones del Webb están permitiendo a los científicos estudiar la formación estelar en la Vía Láctea exterior con el mismo nivel de detalle que las observaciones de la formación estelar en nuestro propio vecindario solar, informa la ESA.
Aunque las nubes Digel están dentro de nuestra galaxia, son relativamente pobres en elementos más pesados que el hidrógeno y el helio. Esta composición las hace similares a las galaxias enanas y a nuestra propia Vía Láctea en su historia temprana. Por ello, el equipo aprovechó la oportunidad de utilizar el telescopio Webb para captar la actividad de cuatro cúmulos de estrellas jóvenes en las Nubes Digel 1 y 2: 1A, 1B, 2N y 2S.
En la Nube 2S, el telescopio Webb capturó el cúmulo principal que contiene estrellas jóvenes recién formadas. Esta zona densa es bastante activa y varias estrellas emiten chorros extendidos de material a lo largo de sus polos. Además, aunque los científicos sospechaban anteriormente que podría haber un subcúmulo dentro de la nube, las capacidades de obtención de imágenes del telescopio Webb confirmaron su existencia por primera vez. Los datos del telescopio Webb revelan que hay múltiples chorros que salen disparados en diferentes direcciones desde este cúmulo de estrellas.
Estas imágenes del telescopio Webb de la Galaxia Exterior Extrema y las Nubes Digel son solo un punto de partida para el equipo. Tienen la intención de volver a visitar este puesto avanzado de la Vía Láctea para encontrar respuestas a una variedad de preguntas actuales, incluida la abundancia relativa de estrellas de varias masas dentro de los cúmulos estelares de la Galaxia Exterior Extrema, una medición que ayudaría a los astrónomos a comprender cómo un entorno particular puede influir en diferentes tipos de estrellas durante su formación.
Aunque la historia de la formación de las estrellas es compleja y algunos capítulos aún están envueltos en misterio, Webb está reuniendo pistas y ayudando a los astrónomos a desentrañar esta intrincada historia.
Estos hallazgos han sido publicados en el Astronomical Journal.