Cáscara De La Almeja Arctica Islandica - WIKIPEDIA
MADRID, 14 Sep. (EUROPA PRESS) -
Cáscaras de almejas de siglos de antigüedad han sido empleadas para ver cómo el sistema climático del Atlántico Norte alcanzó un "punto de inflexión" antes de la Pequeña Edad de Hielo.
Y los investigadores dicen que esta zona oceánica podría estar acercándose a un nuevo punto de inflexión, con importantes consecuencias para el clima de la región.
La Pequeña Edad de Hielo, un período de enfriamiento regional, especialmente en el Atlántico Norte, duró varios siglos y finalizó alrededor de 1850.
Una vieja teoría sugiere que el enfriamiento inicial en este período fue sostenido por "retroalimentación del hielo marino al océano": el hielo marino se expandió y esto ralentizó las corrientes oceánicas, lo que a su vez redujo el flujo de agua cálida del sur.
El nuevo estudio, realizado por la Universidad de Exeter, utilizó las cáscaras de almejas quahog, que pueden vivir varios cientos de años, para comprender cómo ha evolucionado el océano y cómo ha respondido a los cambios externos en los últimos siglos.
Los hallazgos muestran que el sistema climático del Atlántico Norte se desestabilizó y perdió resiliencia (la capacidad de recuperarse de los cambios externos) antes de la Pequeña Edad de Hielo, lo que posiblemente hizo que se "inclinara" hacia un nuevo estado más frío.
Con los científicos advirtiendo que ahora se pueden estar acercando múltiples puntos de inflexión en todo el mundo debido al cambio climático provocado por el hombre, el estudio nos ayuda a comprender cuándo y cómo se desencadenan los puntos de inflexión.
"Una forma de saber que un sistema se acerca a una transición repentina es que se vuelve lento para responder a las perturbaciones (cambios externos)", dijo en un comunicado la autora principal Beatriz Arellano-Nava, del Instituto de Sistemas Globales de Exeter.
"En otras palabras, un sistema pierde la capacidad de volver a su estado promedio y, en cambio, puede 'inclinarse' a un nuevo estado. En el caso del Atlántico Norte antes de la Pequeña Edad de Hielo, esta pérdida de resiliencia hizo que el sistema fuera vulnerable a un cambio abrupto, lo que podría anunciar la transición a las condiciones de la Pequeña Edad de Hielo", dijo el Dr. Paul Halloran, quien codirigió el estudio.
El nuevo estudio advierte que la vulnerabilidad del sistema del Atlántico Norte es un problema crítico en la actualidad, y un análisis reciente sugiere que se ha desestabilizado durante el último siglo y podría estar acercándose a un punto de inflexión.
"Nuestro último análisis sugiere que el sistema de corrientes oceánicas en el norte del Atlántico Norte podría estar en riesgo de volver a un punto de inflexión debido al calentamiento global, lo que conduciría una vez más a un cambio climático abrupto en Europa", dijo el profesor Tim Lenton, director del Global Systems Institute.
El análisis de las conchas de almejas se centró en los isótopos de oxígeno y carbono y el crecimiento de las conchas, todo lo cual puede usarse como medida de la variabilidad ambiental. El artículo se ha publicado en la revista Nature Communications.