Las turbulencias aéreas se han acentuado - PIXABAY
MADRID, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
La turbulencia con cielo despejado, invisible y peligrosa para el tráfico aéreo, ha aumentado en varias regiones del mundo a medida que cambia el clima, revela un estudio de la Universidad de Reading.
En un punto típico sobre el Atlántico Norte, una de las rutas de vuelo más transitadas del mundo, la duración anual total de turbulencia severa aumentó en un 55 %, de 17,7 horas en 1979 a 27,4 horas en 2020, encontró la investigación. La turbulencia moderada aumentó un 37 % de 70,0 a 96,1 horas y la turbulencia ligera aumentó un 17 % de 466,5 a 546,8 horas.
El equipo detrás del estudio, que se publica en Geophysical Research Letters, dice que los aumentos son consistentes con los efectos del cambio climático. El aire más cálido de las emisiones de CO2 está aumentando la cizalladura del viento en las corrientes en chorro, fortaleciendo la turbulencia del cielo despejado en el Atlántico Norte y en todo el mundo.
El investigador Mark Prosser dijo en un comunicado: "La turbulencia hace que los vuelos sean irregulares y, en ocasiones, pueden ser peligrosos. Las aerolíneas deberán comenzar a pensar en cómo manejarán el aumento de la turbulencia, ya que le cuesta a la industria entre 150 y 500 millones de dólares al año solo en los EE.UU. Cada minuto adicional que se pasa viajando a través de la turbulencia aumenta el desgaste de la aeronave, así como el riesgo de lesiones para los pasajeros y asistentes de vuelo".
Si bien los EE.UU. y el Atlántico Norte han experimentado los mayores aumentos, el nuevo estudio encontró que otras rutas de vuelo muy transitadas sobre Europa, Medio Oriente y el Atlántico Sur también experimentaron aumentos significativos en la turbulencia.
El profesor Paul Williams, científico atmosférico de la Universidad de Reading y coautor del estudio, dijo: "Después de una década de investigación que muestra que el cambio climático aumentará la turbulencia en el aire despejado en el futuro, ahora tenemos evidencia que sugiere que el aumento ha Ya ha comenzado. Deberíamos invertir en sistemas mejorados de detección y pronóstico de turbulencias, para evitar que el aire más agitado se traduzca en vuelos más agitados en las próximas décadas".