MADRID, 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
La velocidad en la desaparición de bosques tropicales por talas, fuego u otras causas se ha acelerado en un 62 por ciento desde los años 90 hasta la primera década del siglo XXI.
La estimación, de la Universidad de Maryland, basada en el análisis de grandes cantidades de datos de imágenes Landsat que graban directamente los cambios en los bosques desde hace más de 20 años, invierte dramáticamente una estimación previa de una desaceleración del 25 por ciento en el mismo período.
Ese cálculo anterior, de la Organización para la Agricultura y la Alimentación de las Naciones Unidas (FAO), se basa en una colección de informes de decenas de países.
"Varios estudios locales y regionales basados en satélites se han hecho sobre el cambio de las tasas de deforestación durante ese periodo, pero nuestro estudio es el primer análisis a escala pan-tropical", explica el geógrafo Do-Hyung Kim, autor principal del nuevo estudio aceptado para su publicación en la revista Geophysical Research Letters.
MILES DE FOTOS
Kim y sus colegas de la Universidad de Maryland estudiaron 34 países con bosques que comprenden el 80 por ciento de las tierras tropicales boscosas. Analizaron 5.444 fotos de Landsat de 1990, 2000, 2005 y 2005 con la escala de una hectárea (100 por 100 metros) de resolución para determinar cuánto bosque se perdió y ganó. Su procedimiento fue totalmente automatizado e informatizado, tanto para los grandes conjuntos de datos manejados y para minimizar el error humano.
Encontraron que durante el período 1990-2000, la pérdida anual neta de bosques en todos los países fue de 4 millones de hectáreas por año. Durante el período 2000-2010, la pérdida neta de bosques se elevó a 6,5 millones de hectáreas por año, un aumento del 62 por ciento es la tasa de deforestación.
En cuanto a los lugares donde la deforestación estaba sucediendo, se encontraron con que la América Latina tropical mostró el mayor incremento, con la pérdida neta anual de 1,4 millones de hectáreas por año a partir de la década de 1990 y hasta la década de 2000, con Brasil a la cabeza de la lista con 0,6 millones de hectáreas por año.
Asia Tropical mostró el segundo mayor incremento en 0,8 millones de hectáreas por año, con tendencias similares en Indonesia, Malasia, Camboya, Tailandia y Filipinas. África Tropical mostró la menor cantidad de pérdida anual neta de superficie forestal. Aún así, hubo un aumento constante de pérdida neta de bosques en África tropical, debido a talas principalmente en la República Democrática del Congo y Madagascar.