MADRID, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio que reconstruye las precipitaciones extremas en Arabia ha descubierto que las precipitaciones en la región eran cinco veces más extremas hace apenas 400 años.
Los hallazgos del estudio, dirigido por la Escuela Rosenstiel de Ciencias Marinas, Atmosféricas y de la Tierra de la Universidad de Miami, sugieren que los últimos 2.000 años fueron mucho más húmedos, y que el clima de la región se parecía en el pasado a una sabana con vegetación en la que deambulaban leones, leopardos y lobos, a diferencia del actual desierto hiperárido. El estudio se publicó en la revista Science Advances.
FENÓMENOS EXTREMOS
"Mientras los grandes proyectos de desarrollo como NEOM en Arabia Saudita siguen remodelando el paisaje, estos hallazgos subrayan la necesidad crítica de mejorar la resiliencia climática y la preparación ante desastres para abordar la creciente amenaza de fenómenos meteorológicos extremos en la región", dijo en un comunicado el autor principal del estudio, Sam Purkis, profesor y director del Departamento de Geociencias Marinas de la Escuela Rosenstiel de la Universidad de Miami.
Utilizando un vehículo operado a distancia (ROV) a más de una milla de profundidad desplegado desde el buque de investigación OceanXplorer, el equipo de investigación extrajo núcleos de sedimentos de una piscina de salmuera de aguas profundas en el Golfo de Aqaba, una extensión del norte del Mar Rojo. La química de la salmuera preserva las capas de sedimentos intactas, lo que proporciona un registro único y muy preciso de las tendencias de lluvia del Holoceno tardío.
HACE DOS SIGLOS LLOVÍA EL DOBLE QUE AHORA
Descubrieron que los últimos 2.000 años en Arabia fueron mucho más húmedos, ya que la región alguna vez fue una sabana con vegetación y hace unos 200 años, la cantidad de lluvia era el doble de la actual.
"Este es un registro clave para completar la historia del clima de Medio Oriente. Lo que nos dice es que el clima, tanto el promedio como los extremos, pueden cambiar drásticamente en esta región, y la suposición de estabilidad climática a largo plazo en el desarrollo futuro no es buena", dijo Amy Clement, profesora del Departamento de Ciencias Atmosféricas de la Escuela Rosenstiel de la Universidad de Miami.
Oriente Medio se considera un punto crítico en materia climática, con inundaciones repentinas cada vez mayores provocadas por lluvias torrenciales de invierno, intercaladas con sequías severas, que en Arabia provocan un caos generalizado y desastres humanitarios.
La variabilidad de las precipitaciones del Holoceno tardío pone de relieve la necesidad de una mejor preparación para las inundaciones repentinas y las sequías y de comprender las tendencias hidroclimáticas futuras a medida que Oriente Medio se urbaniza rápidamente. Las inundaciones catastróficas en la península Arábiga en el invierno de 2024 subrayan la urgencia de estudiar la frecuencia y los factores desencadenantes de estos fenómenos meteorológicos extremos.