Las huellas químicas de los niveles de CO2 pasados ??se conservan en conchas fósiles microscópicas como este foraminífero. - UNIVERSIDAD DE ST. ANDREWS
MADRID, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio de los niveles históricos de dióxido de carbono enfatiza que se necesitan acciones urgentes para evitar niveles prehistóricos de cambio climático.
El equipo internacional de científicos, dirigido por la Universidad de St. Andrews, recopiló datos que abarcan los últimos 66 millones de años para proporcionar nuevos conocimientos sobre los tipos de climas que podemos esperar si los niveles de CO2 continúan aumentando al ritmo actual. El aumento proyectado resultaría en niveles prehistóricos de calor que nunca han experimentado los humanos.
El estudio, publicado en la revista científica Annual Review of Earth and Planetary Sciences, proporciona la historia más completa hasta la fecha de cómo ha cambiado el CO2 en los últimos 66 millones de años, el tiempo desde que los dinosaurios vagaron por el planeta por última vez. Los datos recopilados muestran más claramente que nunca el vínculo entre el CO2 y el clima.
Trabajando con colegas de la Universidad Texas A&M, la Universidad de Southampton y la Universidad Suiza ETH Zürich, el equipo internacional reunió los datos recopilados durante los últimos 15 años utilizando técnicas de laboratorio de alta tecnología.
Se tomaron muestras de núcleos de lodo del fondo del mar profundo, donde se acumulan fósiles microscópicos y moléculas antiguas, preservando una historia de cómo era el CO2 y el clima en ese momento. Al disparar estos átomos antiguos a través de instrumentos súper sensibles, los científicos pueden detectar las huellas químicas de los cambios pasados en el CO2, que se pueden comparar con los cambios actuales. Por ejemplo, el estudio explica, a través de la quema de combustibles fósiles y la deforestación, cómo los humanos ahora han hecho que el CO2 vuelva a niveles no vistos desde hace unos tres millones de años.
El doctor James Rae, de la Facultad de Ciencias de la Tierra y el Medio Ambiente de la Universidad de St Andrews, que dirigió el equipo internacional, explicó en un comunicado: "Por ejemplo, la última vez que el CO2 fue tan alto como lo es hoy, suficiente hielo derretido para elevar el nivel del mar en 20 metros y hacía suficiente calor para que crecieran hayas en la Antártida.
"Si permitimos que la quema de combustibles fósiles continúe creciendo, nuestros nietos pueden experimentar niveles de CO2 que no se han visto en la Tierra durante unos 50 millones de años, una época en la que los cocodrilos vagaban por el Ártico".
El doctor Rae agregó: "El CO2 ha transformado la faz de nuestro planeta antes y, a menos que reduzcamos las emisiones lo más rápido posible, lo volverá a hacer".