Los gusanos de la harina se alimentan de salvado y microplásticos en el laboratorio. - MICHELLE TSENG
MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
Una nueva investigación basada en gusanos de la harina muestra cómo estos insectos se mantienen saludables comiendo microplásticos, apoyando su uso frente a la creciente contaminación por esta causa.
Investigaciones anteriores descubrieron que los insectos pueden ingerir y absorber microplásticos puros, sin refinar, pero solo en situaciones poco realistas de escasez de alimentos. En un artículo de Biology Letters, la zoóloga de la UBC (Universidad de British Columbia), la doctora Michelle Tseng, y la exalumna Shim Gicole probaron gusanos de la harina en un escenario más realista, alimentándolos con mascarillas faciales molidas (un producto plástico común) mezcladas con salvado, una opción más sabrosa.
Los gusanos de la harina son carroñeros y descomponedores de la naturaleza, capaces de sobrevivir hasta ocho meses sin comida ni agua, y dispuestos a comer a su propia especie cuando la comida escasea.
Después de 30 días, el equipo de investigación descubrió que los gusanos de la harina comieron aproximadamente la mitad de los microplásticos disponibles, alrededor de 150 partículas por insecto, y aumentaron de peso. Excretaron una pequeña fracción de los microplásticos consumidos, alrededor de cuatro a seis partículas por miligramo de desechos, absorbiendo el resto. El consumo de microplásticos no pareció afectar la supervivencia y el crecimiento de los insectos.
La doctora Tseng dice que el próximo paso será aprender de los mecanismos digestivos de los insectos cómo descomponer los microplásticos y ampliar estos conocimientos para abordar la contaminación plástica. "Tal vez podamos empezar a ver a los insectos como amigos. Estamos matando millones de insectos todos los días a causa de los pesticidas generales, los mismos insectos de los que podríamos estar aprendiendo a descomponer estos plásticos y otros productos químicos".