MADRID 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Observatorio Europeo Austral (ESO) ha obtenido la imagen del cúmulo de estrellas 'NGC 6362', que presenta una curiosidad en su actividad estelar: es el hogar de muchas estrellas azules, estrellas viejas que se hacen pasar por jóvenes.
La fotografía fue captada por el instrumento Wide Field Imager, instalado en el telescopio MPG/ESO de 2,2 metros, en el Observatorio La Silla (Chile). Esta nueva imagen, junto con otra de la región central obtenida por el telescopio espacial Hubble de la NASA/ESA, proporcionan la mejor visión jamás obtenida de este cúmulo poco conocido, ha apuntado el observatorio.
Según han explicado los expertos, los cúmulos globulares están compuestos, principalmente, de decenas de miles de estrellas muy viejas, pero también contienen algunas estrellas con aspecto sospechosamente joven. En la imagen pueden verse numerosas estrellas amarillentas del cúmulo, aquellas que ya han vivido la mayor parte de sus vidas y se han convertido en estrellas gigantes rojas, además de las azules que caracterizan este cúmulo.
Todas las estrellas de un cúmulo globular se formaron a lo largo de un periodo de tiempo bastante corto --la mayor parte hace unos diez mil millones de años--. Aún así, las rezagadas azules son más azules y más luminosas y, por ende, más masivas de lo que deberían ser tras diez mil millones de años de evolución estelar.
Las estrellas azules son estrellas calientes que consumen su combustible rápidamente, de manera que si estas estrellas se formaron hace unos diez mil millones de años, deberían haberse apagado hace mucho tiempo.
Los astrónomos necesitan comprender el secreto de la aparente juventud de las rezagadas azules. Actualmente hay dos teorías principales: que son estrellas en colisión y fusión; o una transferencia de material entre dos estrellas compañeras. La idea básica tras ambas opciones es que estas estrellas no nacieron tan grandes como se ven hoy, pero recibieron una inyección de material extra en algún momento de su vida y esto les proporcionó un tiempo extra.
Pese a que no es tan conocido como otros cúmulos globulares más brillantes, 'NGC 6362' es muy interesante para los astrónomos y ha sido muy estudiado a lo largo del tiempo, ha apuntado ESO. Esta brillante bola de estrellas se encuentra en la constelación austral de Ara (El Altar). Puede verse fácilmente con un telescopio pequeño y la localizó por primera vez en 1826 el astrónomo escocés James Dunlop utilizando un telescopio de 22 centímetros en Australia.