MADRID, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
Científicos chinos ultiman una mejora en la transmisión de señales por la primera línea de comunicación cuántica comercial del mundo, entre Pekín y Shanghai, de 2.000 kilómetros, abierta en septiembre.
Un equipo dirigido por Pan Jianwei, de la Academia de Ciencias de China, ha continuado una investigación profunda para optimizar la transmisión de la línea de comunicación cuántica, por lo que no se producirá un atasco cuando aumente el número de usuarios, dijo Xu Wu, jefe del Partido Comunista de la Universidad de Ciencias y Tecnología de China con sede en Hefei, capital de la provincia de Anhui, este de China.
Debido a la atenuación de la fibra óptica, se necesitan estaciones repetidoras para extender la distancia de comunicación cuántica. Hay más de 30 estaciones de retransmisión, con una distancia promedio de aproximadamente 80 kilómetros entre ellas, en la línea Pekín-Shanghai.
El equipo de investigación está trabajando para ampliar la distancia entre dos estaciones a 300 o 500 kilómetros para reducir el número de estaciones de transmisión y, en consecuencia, el costo total, dijo Xu, uno de los más de 2,200 delegados al XIX Congreso Nacional del Partido Comunista de China (CPC), que se inauguró el miércoles en Pekín.
Se hará un gran avance en este sentido en un futuro cercano, dijo el funcionario del Partido, cuya universidad está solicitando un laboratorio nacional en el campo cuántico.
La comunicación cuántica tiene una seguridad ultra alta. Es imposible interceptar, interceptar o descifrar la información transmitida a través de este medio, informa la Academia de Ciencias de China, citando a la agencia Xinhua.
La línea de comunicación cuántica Pekín-Shanghai está conectada al primer satélite cuántico del mundo, que China lanzó en agosto del año pasado, a través de una estación en Pekín. El satélite recibe el apodo de Micius, en honor de un filósofo y científico chino del siglo V antes de Cristo, acreditado como la primera persona en realizar experimentos ópticos.