MADRID, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -
La capsaicina, un componente que proporciona el sabor picante a los jalapeños, los conocidos pimientos mexicanos, conduce a las células del tumor de próstata a su autodestrucción, según un estudio del Centro Médico Cedars-Sinaí y la Universidad de California en Los Ángeles (Estados Unidos) que se publica en la revista 'Cancer Research'.
Este componente de la pimienta provocó que aproximadamente el 80 por ciento de las células de cáncer de próstata que crecían en ratones siguieran los mecanismos moleculares que conducen a la apoptosis o muerte celular programada. Los tumores de cáncer de próstata tratados con capsaicina tenían el tamaño de la quinta parte de los tumores de ratones no tratados.
Según Sören Lehman, autor principal del estudio, "la capsaicina tuvo un profundo efecto antiproliferativo sobre las células humanas de cáncer de próstata en cultivo y también redujo de forma destacable el desarrollo de los tumores de próstata formados por las líneas humanas celulares que crecían en ratones".
Lehman estimó que la dosis de extracto de pimienta con la que se alimentaba a los ratones era equivalente a proporcionar 400 miligramos de capsaicina tres veces a la semana a un hombre de algo más de 90 kilogramos, aproximadamente entre tres y ocho pimientos "habanera" frescos, dependiendo del contenido de capsaicina de los pimientos.
Los pimientos del tipo "habanera" son los que tienen un mayor contenido de capsaicina, según el índice específico para evaluar el grado de picante conocido como escala Scoville. Estos pimientos, nativos de Yucatán, suelen contener más de 300.000 unidades Scoville.
La variedad más popular de jalapeño procedente de Oaxaca (México) y el sudeste de los Estados Unidos, contiene entre 2.500 y 5.000 unidades Scoville.
Los científicos observaron que la capsaicina inhibió la actividad de un mecanismo molecular, el NF-kappa Beta, que participa en los sistemas celulares que conducen a la apoptosis, o muerte celular, en muchos tipos de células.
Los expertos explican que la apoptosis es un fenómeno celular normal que se produce en muchos tejidos gracias al que se mantiene un equilibrio entre las células nuevas de reemplazo y aquellas que son más viejas o están ya deterioradas. En contraste, señalan los autores, las células cancerígenas intentan ser inmortales y a menudo evaden la apoptosis a través de la mutación o desregulación de los genes que participan en el proceso.
El extracto de estos pimientos también frenó el crecimiento de las células del tumor de próstata mediante la regulación de los receptores de andrógenos, las proteínas activadas por esteroides que controlan la expresión de determinados genes asociados al crecimiento.
El componente picante de los pimientos redujo además la creación de PSA, una proteína que a menudo es producida en altas cantidades por los tumores de próstata y que puede señalar la presencia del tumor en hombres.