El tomate, cultivo tradicional catalán
FUNDACIÓ MIQUEL AGUSTÍ
Actualizado: miércoles, 30 mayo 2012 21:08

MADRID 30 May. (EUROPA PRESS) -

Por primera vez, el genoma completo del tomate (Solanum lycopersicum) ha sido descifrado, lo cual es un paso importante hacia la mejora del rendimiento, la nutrición, la resistencia a las enfermedades, el sabor, y el color del tomate, así como de otros cultivos. La investigación ha sido publicada en la revista 'Nature'.

La nueva publicación reúne los resultados de años de trabajo de los miembros del Tomato Genomics Consortium, una colaboración internacional en la que participan Argentina, Bélgica, China, Francia, Alemania, India, Israel, Italia, Japón, los Países Bajos, Corea del Sur, España, Reino Unido, Estados Unidos, y otros países.

James Giovannoni, científico en el Instituto Boyce Thompson para la Investigación con Plantas, ubicado en el campus de la Universidad de Cornell, y el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, dirigieron al equipo encargado de la secuenciación del tomate en Estados Unidos, que incluye a investigadores de varias instituciones. También se llevó a cabo la secuenciación del tomate silvestre (Solanum pimpinellifolium), en el Laboratorio Cold Spring Harbor, en Nueva York.

Los investigadores afirman que los tomates poseen unos 35.000 genes, organizados en 12 cromosomas. La secuencia del genoma del tomate proporciona información detallada sobre la evolución del fruto, información que permitirá producir nuevas variedades, con características mejoradas. Por otro lado, ahora que se conoce la secuencia del genoma de dos variedades de tomate, será más fácil, y mucho menos costoso, secuenciar otras variedades.

Para facilitar el acceso a las secuencias genéticas del tomate, el científico del Instituto Boyce Thompson, Lukas Mueller, y su equipo, han creado un sitio web interactivo: www.solgenomics.net.

La secuenciación del genoma del tomate tiene implicaciones para otras especies de vegetales. Fresas, manzanas, melones, plátanos, y otros muchos frutos carnosos, comparten algunas características con los tomates, por lo que la información sobre los genes y las vías involucradas en la maduración del fruto se podrían aplicar también a estos, ayudando a mejorar la calidad de los alimentos, la seguridad alimentaria y reducir costos.