Descubierto el mecanismo que permite a la planta Venus atrapamoscas capturar a los insectos

Actualizado: miércoles, 26 enero 2005 21:00

MADRID, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -

Investigadores de la Universidad de Harvard (Reino Unido) han descubierto el mecanismo que permite a la planta Venus atrapamoscas capturar a los insectos. La planta insectívora convierte sus hojas en mandíbulas a través de un mecanismo que las hace curvarse. Los resultados del estudio se publican esta semana en la revista 'Nature'.

Según los expertos, el mecanismo que permite "morder" a la planta carnívora 'Dionae muscipula', conocida popularmente como Venus atrapamoscas, es uno de los movimientos más rápidos que se encuentran en la naturaleza en el ámbito de las plantas. Hasta ahora, los científicos desconocían cómo el atrapamoscas cerraba sus mandíbulas en una décima de segundo teniendo en cuenta que no se podía beneficiar de músculos o nervios.

Los científicos muestran en un nuevo análisis de la velocidad de cierre de la planta que bajo la estimulación de los insectos se activan cambios en la curvatura de las hojas que las convierten en una auténtica trampa. Los científicos investigaron la secuencia de hechos entre la estimulación de las hojas y el cierre de estas mandíbulas vegetales. A través de una cuidadosa disección de las hojas los investigadores encontraron que la curvatura era el resultado de tensiones que doblaban las hojas hacia el exterior como un arco.

Los científicos tintaron docenas de puntos fluorescentes en las hojas y las filmaron a alta velocidad con una cámara de extrema sensibilidad a la luz ultravioleta para ver exactamente cómo la geometría de las hojas cambiaba en el momento en que se libera la tensión durante el mordisco.

Según los investigadores, la hoja logra su rápido cierre por un proceso semejante al de unas lentes de contacto que se invierten de dentro a fuera. Una vez estimulada, la hoja cambia su curvatura ligeramente, un proceso que parece ser controlado por la planta pero que aún no se entiende bien. No obstante, este cambio significa que las tensiones elásticas en la hoja no se pueden mantener mucho tiempo y que las mandíbulas cierran a la vez, atrapando a su presa.