MADRID 1 Sep. (EUROPA PRESS) -
Astrónomos del observatorio espacial de rayos x de la NASA Chandra han descubierto la primera pareja de agujeros negros supermasivos en una galaxia espiral similar a la Vía Láctea. Situados aproximadamente a 160 millones de años luz de la Tierra, esta pareja es la más cercana conocida de este tipo de fenómenos.
El agujero negro se encuentra cerca del centro de la galaxia espiral NGC 3393. Separados por sólo 490 años luz, estos agujeros negros son probablemente el remanente de la fusión de dos galaxias de masas desiguales de mil millones de años o más.
"Si esta galaxia no estuviera tan cerca, no habríamos tenido ninguna posibilidad de separar los dos agujeros negros de la manera que los tenemos", dijo Pepi Fabbiano, del Centro Harvard-Smithsoniano para Astrofísica (CfA) en Cambridge, Massachusetts, quien dirigió el estudio que aparece en la edición en línea de esta semana de la revista Nature.
"Esta galaxia está justo delante de nuestras narices para los estándares cósmicos, lo que nos hace preguntarnos ¿cuántos de estos pares de agujeros negros nos hemos estado perdiendo."
Las observaciones anteriores en rayos-X y en otras longitudes de onda indica que solo existía un único agujero negro supermasivo en el centro de NGC 3393. Sin embargo, una observación con Chandra permitió a los investigadores detectar y separar estos agujeros negro duales. Los dos agujeros negro están creciendo activamente y emitiendo rayos X a medida que el gas cae hacia ellos y se hace más caliente.
Cuando se fusionan dos galaxias espirales de gran tamaño, los astrónomos creen que debería formarse un par de agujeros negro y una galaxia con una apariencia alterada y una intensa formación estelar. Un ejemplo bien conocido es el par de agujero negros supermasivos de NGC 6240, que se encuentra a unos 330 millones de años luz de la Tierra.
Sin embargo, NGC 3393 es una galaxia espiral muy bien organizada, y su núcleo central está dominada por estrellas viejas. Puede ser el primer ejemplo conocido en la fusión de una galaxia grande y otra mucho más pequeña, llamada una "fusión de menor importancia" por los científicos, que ha dado como resultado la formación de una pareja de agujeros negros supermasivos.